Maltrato animal: imponen la probation como forma de evitar reincidencias
Desde la fiscalía bahiense se buscan salidas alternativas al debate oral, con la finalidad de que los imputados reflexionen sobre la conducta desplegada.
“Un fracasado es un hombre que ha cometido un error, pero que no es capaz de convertirlo en experiencia”, afirmó el ensayista estadounidense Elbert Hubbard.
Ese es el espíritu que adoptó desde hace un tiempo el Equipo de Trabajo en Causas de Malos Tratos y Actos de Crueldad contra los Animales de la fiscalía bahiense, aceptando resolver las causas sin llegar a un debate, pero implementando para los imputados una serie de reglas de conducta que les permita comprender la reprochable acción que desplegaron y reparar el daño causado.
“En la generalidad de los casos, el Ministerio Público trabaja para llevar a los imputados a un juicio oral y público, acusándolos ante un juez por el delito que cometieron y solicitándole la aplicación de una pena. Ello en el entendimiento de que las mismas cumplen un rol útil para la vida pacífica en sociedad, en tanto tienen una finalidad preventiva frente a la comisión de nuevos delitos”,
Nueva.” describió a “La el secretario de la Fiscalía General, doctor Santiago Garrido.
Sin embargo, refirió que ante el escaso monto previsto en las sanciones para este tipo de hechos -un máximo de un año de prisióny la falta de antecedentes que presenta la mayor parte de los acusados, “la aplicación del instituto de la suspensión de juicio a prueba se presenta como una opción conveniente y superadora a la exigua pena privativa de libertad de cumplimiento efectivo que, eventualmente, podría llegar a obtenerse en un debate”.
Esta salida alternativa está prevista para casos con penas cuya sanción máxima no exceda los 3 años de cárcel.
“Esto se lleva adelante siempre y cuando se le pueda dar un sentido práctico a los requisitos que establece la ley para su concesión, de forma que nos permita lograr las finalidades de protección de la víctima animal, la reparación del daño causado y la prevención de nuevos delitos por parte de los imputados a través de la toma de conciencia e internalización de las pautas de conductas socialmente aceptables respecto al trato que se les debe dar a los animales”, agregó Garrido, referente de la oficina de Maltrato Animal, pionera en el tema a nivel nacional.
Una opción aceptada
Garrido describió que en los últimos tiempos han resuelto una importante cantidad de causas bajo esta modalidad.
Una de ellas, por ejemplo, tuvo que ver con un hecho registrado a fines de 2017 en Pedro Luro, cuando un hombre amarró a un perro al enganche de una camioneta y lo arrastró durante unos 600 metros, hasta que fue interceptado por efectivos policiales que advirtieron lo que estaba sucediendo.
Según se indicó, el acusado dijo que el perro era suyo y había matado gallinas de un vecino, lo cual había provocado su enojo.
Como consecuencia de esto, el animal resultó con múltiples heridas en sus extremidades y en la parrilla costal derecha, debiendo recibir calmantes y antibióticos.
Tras la investigación penal preparatoria, la fiscalía acordó una suspensión de juicio a prueba por un año, dictada por el juez en lo Correccional Nº 1, Gabriel Giuliani.
Al acusado se le impuso la obligación de someterse a un tratamiento psicológico, realizar 30 horas de trabajo comunitario y participar de la charla denominada "Cuidados mínimos a animales y responsabiliad derivada de la guarda", impartida por voluntarios del programa "Voz Animal".
También se aceptó un ofrecimiento reparatorio realizado por el individuo, consistente en proporcionar un alambrador para realizar un cerco de cien metros de largo en un refugio de animales ubicado en la localidad del partido de Villarino.
Sin caballos
Una decisión similar se adoptó respecto de un incidente que tuvo lugar la tarde del 19 de diciembre de 2018 en nuestra ciudad.
En la intersección de Juan Manuel de Rosas y Fragata Sarmiento, personal de la seccional Cuarta detectó que una yegua, que se encontraba en mal estado de salud, estaba siendo utilizada para tirar de un carro.
El equino, que no tenía
En ambos casos los acusados también debieron concurrir a firmar al Patronato de Liberados.
herrajes y estaba amamantando, cayó desplomado cuando le quitaron el arnés, producto de la deshidratación y convulsiones que sufrió debido a las altas temperaturas.
El caso finalizó ante el Juzgado de Garantías Nº 1, donde se determinó la suspensión de juicio a prueba por un año para el “dueño” del animal, además de prohibirle tener otros caballos durante ese tiempo.
De la misma forma, se estableció la cesión de los caballos secuestrados (la yegua y su cría) en favor del Estado.
Según se explicó, esto sirve para formalizar la desposesión, dando lugar a la adopción definitiva por parte de un particular y evitar reclamos posteriores de restitución por parte del imputado.
Sobre esta modalidad implementada, Garrido opinó que "son grandes y novedosos avances en materia de derecho animal a nivel país y son precedentes que colocan a la justicia bahiense en el podio de las jurisdicciones que más respetan a los animales como seres sintientes víctimas de delitos".
Finalmente, consideró que "mientras la legislación aplicable sea la que existe en la actualidad, desde el Equipo de Trabajo en Causas de Malos Tratos y Crueldad contra los Animales estamos convencidos de que esta es la mejor manera de coronar los esfuerzos que se realizan para avanzar con estas investigaciones, que requieren mucho esfuerzo y presentan particularidades que las hacen dificultosas".