La foto, el diario y los escándalos mediáticos de los noventa
La historia detrás del encuentro del periodista Julio Ayala Torales con Diego, en los tribunales porteños.
Diego, el testigo más querido”. Así tituló el diario Clarín la foto de tapa que se robó las miradas de la edición del miércoles 30 de octubre de 1996. Se ve a Diego Maradona posando con un grupo de empleados, en su mayoría de la fotocopiadora de los tribunales de Comodoro Py (Buenos Aires). El día anterior El Diez había permanecido seis horas en el juzgado, por unas escuchas en la recordada causa por la droga en el jarrón de Guillermo Coppola.
Los chicos de la fotocopiadora lo vieron y no quisieron perder la oportunidad. Entre ellos, el periodista y relator puntaltense Julio Ayala Torales.
"Ver gente famosa desfilando por ahí y fotocopiar los cuerpos de los expedientes era cosa de todos los días. Por ejemdo
La persona que sacó las fotos se puso nerviosa, buscaba el mejor ángulo. Diego le dijo: “Dale maestro, sacate los guantes de box”.
“plo me tocó fotocopiar todos los cuerpos de la causa IBM-Banco Nación...", le Nueva.”. contó Julio a “La “En ese momento estaba en auge el programa de Mauro Viale, que llevaba todo este tipo de personajes y donde se armaban escándalos. Entonces por tribunales desfilaban Coppola, Samantha Farjat, Natalia De Negri y otros...”, dijo.
“Un día cayó Maradona y fue un revuelo bárbaro. Nos enteramos y lo fuimos a esperar al 5º piso. Cuando lo vimos venir fuimos todos a sacarnos fotos. Mil fotos, con cámaras comunes. Lo rodeamos y lo abrazamos. Me acuerdo que la persona que sacó las fotos se puso nerviosa porque buscaba el mejor ángulo. Diego le dijo: `¡Dale maestro, sacate los guantes de box!´”, contó.
Al día siguiente Julio se vio en la tapa de "Clarín".
“En el subte había varias personas leyendo el diario. Alguien al lado mío me miraba y miraba el diario. ‘Es este’, dijo. Después, cuando llegué al juzgado, estaba el joven movilero Sergio Lapegüe. Dijo: ‘¡Ahí viene otro de los que estaban en la foto!’ Me quiso entrevistar pero mi jefe me había avisado que no diéramos notas porque se armaba quilombo. Y resultó que el día de la tapa de Clarín también era el día del cumpleaños de Maradona”, agregó.
La difusión de aquel encuentro tuvo consecuencias inesperadas.
“Existía una interna entre los jueces. El que citó a Diego para las escuchas, Gabriel Cavallo, había verdugueado al juez Carlos Branca el año anterior por una fiesta de fin de año adentro del juzgado, con los fiscales y demás. Parece que en ese festejo la cosa se desmadró y Cavallo armó un escándalo. Al saber de las fotos, el juez Branca le pasó la factura. Dijo que nos estábamos fotografiando con un testigo de una causa por narcotráfico. A fin de año, a todos los que estábamos ahí nos volaron a la mierda”, recordó. Le quedaron las fotos, un póster y algo más.
"De ese día hay una escena en la película de Kusturica, cuando Diego sale del juzgado. Dicen que la foto también se publicó en un libro sobre Guillermo Patricio Kelly bajo el título `Los narcos judiciales´. Nunca lo confirmé", concluyó.