Más árboles, una iniciativa que ya da frutos
Los primeros ejemplares se colocaron en el parque Noroeste, un espacio que, aunque pertenece al Estado, es cuidado por los vecinos.
UNA NOTA
publicada la semana última por este diario dio cuenta de cómo un grupo de personas utilizó las redes sociales para colaborar con la forestación de la ciudad creando –en este caso a través de Facebook— un sitio titulado “Plantada Colectiva”.
EN EL
tiempo que llevan de trabajo han colocado cerca de cien ejemplares en diferentes espacios públicos, lo cual, más allá del número, implica que la idea de unirse detrás de un objetivo va siendo llevada a la realidad con resultados más que postivos.
LOS PRIMEROS
ejemplares se colocaron en el parque Noroeste, un espacio que, a pesar de ser propiedad del Estado nacional ha sido poco a poco colonizado por los propios vecinos, que gradualmente han colocado plantas, árboles y otros componentes hasta reconvertirlo en un atractivo lugar de encuentro para todos los bahienses.
EL ÁRBOL
más elegido por el grupo es el aguaribay, una especie que se adapta muy bien al clima local, sin ser una plaga, y que tiene la ventaja de presentar un rápido crecimiento, por lo que rápidamente transforma el paisaje en el que se lo planta.
DE ACUERDO
a profesionales que los asesoran, la idea es siempre colocar especies autóctonas, que son las que pueden adquirir del suelo los nutrientes necesarios para su crecimiento, brindando ejemplares saludables y autónomos.
TAMBIÉN SE
colocaron caldenes, espinillos y cina cina, resistentes a la sequía y que no necesitan abundante riego, a diferencia de otras plantas exóticas que sufren durante su adaptación y por lo tanto son más difíciles de mantener sanas.
EL GRUPO
está abierto a todos quienes deseen sumarse a participar tanto donando árboles como siendo partícipes de las plantaciones y cuestiones logísticas.
MÁS ALLÁ
de lo elogiable de la iniciativa, sería sumamente importante que se involucre en el municipio en esta tarea, considerando la existencia de un Plan Director de arbolado que contempla qué especies convienen a cada sitio de la ciudad.
SOBRE TODO,
para el posterior cuidado y regado de los ejemplares, una tarea compleja y clave para su crecimiento, que no puede quedar librada únicamente a la voluntad de los vecinos, por buena que esta sea.