El 84% de los rascacielos es posterior al 11-S
La cifra corresponde a los edificios de más de 200 metros de altura construidos durante los últimos veinte años.
El 11 de septiembre de 2001, aseguran algunos, fue el día que “cambió el mundo”. El ataque terrorista a las torres gemelas del World Trade Center marcó a fuego el inicio del nuevo siglo. Uno de los pensamientos surgidos en el mundo de la ingeniería y la arquitectura fue que lo ocurrido –dos aviones impactando en torres icónicas y simbólicas del poder — pondría un freno a las construcciones en altura. Sin embargo, nada de eso ha pasado. Al contrario.
El Consejo de Edificios Altos y Hábitat Urbano (CTBUH) informó que el 84 % de los rascacielos de más de 200 metros de altura se han construido en los últimos 20 años. La estadística es parte del informe que investigó el impacto que tuvo el ataque terrorista en el diseño de rascacielos.
El World Trade Center era uno de los 285 edificios de más de 200 metros en 2001. Desde el ataque, se han construido 1.480 rascacielos de más de esa altura. Esto significa que el 84 por ciento fueron construidos en los últimos 20 años, aumento que va en contra de las predicciones tras el ataque terrorista.
Los detalles
“Después del 11 de septiembre, la era de los rascacielos parecía haber llegado a su fin", dijo la CTBUH. Muchos creyeron que no nos sentiríamos cómodos viviendo y trabajando en edificios icónicos, dado su perfil de objetivos ", continuó.
Los constructores de rascacielos confirman "un renacimiento del diseño y desarrollo de edificios altos después del 11 de septiembre". En total, 86 de los 100 edificios más altos se han construido en los últimos 20 años.
Si las torres gemelas estuviesen de pie, ocuparían el puesto 31 del mundo encambio tre las más elevadas, cuando al momento de su destrucción ocupaban el cuarto lugar.
También ha habido un en el lugar donde se construyen los rascacielos. Antes de 2001, casi la mitad estaban en América del Norte. Esta cifra se redujo al 15%, mudándose a Asia y Oriente Medio.
Los cambios que se perciben se relacionan con cálculos más minuciosos de las estructuras, para que las cargas se distribuyan de manera más amplia, y el destino de las torres, que dejaron de ser de oficinas para tener uso mixto y hoteleras.