A 60 años del debut de Piazzolla en Bahía con Isabel Sarli
Fue el domingo 1 de octubre y se presentó con su Quintento Nuevo Tango.
quel domingo 1 de octubre de 1961, Astor Piazzolla debutó en Bahía Blanca con su Quinteto Nuevo Tango, que había fundado en mayo del año anterior. Y que signó un quiebre definitivo con el tango tradicional, basado en su novedosa acentua
Ación del compás del 4 por 8, alternándolo con el clásico 4 x 4 y el 2 x 4 (la milonga).
El anuncio inicial previsto por los empresarios bahienses Segundo Fernández y Alberto Fort era presentarlo en la sede del club Olimpo, Sarmiento 52. El deceso del doctor Domingo Ighina, presidente de la entidad, determinó el cese de las actividades en adhesión al duelo.
Se decidió que se presentara en la sala del Palacio del Cine, en la segunda cuadra de la calle Chiclana, donde se exhibía el filme
La burreríta de Ypacarai, realización de Armando Bó, con Isabel Sarli.
Las funciones tuvieron lugar a las 17.10 y 21.40, proyectándose luego el citado filme a las 17.50 y 22.20.
Escaso público para Piazzolla, calculado en unas 20 personas por función. Muchos más espectadores para Isabel Sarli.
El quinteto Nuevo Tango estuvo integrado por Elvino Vardaro (violín), Jaime Gosis (piano), Oscar López Ruiz (guitarra eléctrica) y Enrique Kicho Díaz (contrabajo), más el aporte vocal de Héctor De Rosas. El breve repertorio incluyó Prepárense, Tierrita, María, Bandoneón arrabalero, Don Juan, Chiqué , Quejas de bandoneón y Triunfal.
A la mañana siguiente hizo una actuación en vivo en la sala auditorio de LU3, presentado por Bill Américo Brussa.
Días después se publicó una entrevista en “La Nueva Provincia”, realizada por Bruno Passarelli, donde señaló enfáticamente: “Concibo al nuevo tango como expresión de estudio y superación, que debe romper las barreras tradicionalistas”.
“El tango que elaboro se embellece y valoriza con nuevas formas, sin resentir su ritmo y melodía”.
“Mi objetivo no es acaparar a las masas. Tal vez el tango moderno sea pasión de una minoría, pero confío en que la propia evolución cultural del pueblo vaya acercándolo a nuestra inquietud”.
“Los tradicionalistas no buscan evolucionar y hoy, detenerse, es retroceder. Adhiero al tango de avanzada, el de Troilo, Pugliese y Salgán, aunque se asustaron”.
Y en respuesta a quienes lo sindicaban como “sepulturero del tango”, ironizó: “Tal vez tengan razón, porque nosotros somos sepultureros, pero de los malos tangueros”
Pocos vislumbramos en esa época la importancia de este quinteto, cuya hegemonía en la escena del tango se extendió hasta 1970, para luego refundarlo durante otro década (1978-1988) en escenarios de todo el mundo.
Piazzolla visitaría nuestra ciudad el 14 de octubre de 1968, para brindar una disertación con Horacio Ferrer en la Universidad Nacional del Sur, sobre su operita María de Buenos Aires.
El 10 de abril y 2 de septiembre de 1972 actuó con su Conjunto Nueve en el Teatro Municipal. El 2 de septiembre de 1979 en el Teatro Don Bosco, y el 1 de septiembre de 1983 en el Teatro Don Bosco.