“Que aparezcan estas franquicias es lo que necesita la Liga”
Nicolás Paletta jugará en Riachuelo (La Rioja), debutando el martes. A los 33 años ya tiene otra carrera pensando a futuro.
Nicolás Paletta lo invadían la dudas. Estaba por empezar la Liga 2020-21 y él entrenaba, solo, por su cuenta, en Bahía. Mataba el tiempo y desarrollaba su vocación de servicio. Era septiembre y desde marzo no jugaba. Empezaba a ver la realidad, sin los ojos del deportista profesional.
“Siempre veo la diferencia durante el receso -reconoce-, porque el club en la temporada te da la vivienda, la comida, el sueldo... tenés todo”.
—Como que durante el receso vivís la realidad y después sos jugador de
Abásquet profesional.
-Exacto. Y lo pienso siempre. Volvería a elegir lo misma carrera, porque me gusta y la disfruto. Sé que hay mucha gente que daría cualquier cosa por trabajar de lo que le gusta. Decidido a buscar alguna alternativa laboral, surgió la propuesta de Comunicaciones de Mercedes como reemplazo y cumplido el plazo saltó a Oberá. Es decir, terminó jugando, tal cual su deseo.
—¿Te vas proyectando más allá del básquet?
—En diciembre me recibí de Martillero y Corredor Público, y estoy haciendo algo a la par, al menos a distancia. El día que termine de jugar profesionalmente trabajaré de eso, pero si puedo seguir hasta los 50 en la categoría que sea no voy a dudarlo, disfruto el día a día.
Próximo a cumplir 34 años, el base dio el sí ni bien lo llamaron de Riachuelo, que el martes debutará ante San Lorenzo, en la inauguración de la 2021-22 de la Liga Nacional.
“Hasta ahora, va todo bien por ser un club nuevo”, le contó Nico a “La Nueva”.
Es la primera vez que el base integra un equipo debutante.
“La dirigencia se encuentra con algo totalmen- te nuevo en varias cuestiones -apunta- y ahí es donde surge la diferencia entre categorías”.
—¿La dirigencia en esos casos se abre para intercambiar opiniones con los jugadores?
—Depende de cada club y, como ahora, nosotros aconsejamos. Por ejemplo, debatimos la cantidad de partidos a jugar en las giras, en cómo viajar y demás, aunque la decisión final la toma el dirigente.
—¿Notás que hay respaldo ante esta nueva experiencia?
—Sí. Fui el primero en arreglar.
—Toda una apuesta.
—Sí, totalmente. La provincia hacía 25 años que no tenía un representante en la Liga y el equipo hace dos años participaba del torneo local. Todo fue muy rápido para ellos. Cuando vi el armado me entusiasmé, no cualquiera contrata a Martín Leiva, Eric Flor, Pablo Espinoza... La gente y la dirigencia está muy entusiasmada. Imaginate que el martes el debut va televisado contra San Lorenzo en el Domo, un gran estadio, con todo lo que eso genera acá.
—De todos modos, ¿sos consciente de que estas apariciones repentinas asustan un poco cuando se analizan a futuro, más allá que el tiempo será testigo de lo que pueda suceder?
—No porque esté acá, pero yo celebro esta participación porque, como decía León (Najnudel), “la Liga la juega el que puede y no el que quiere”. Y hoy es una realidad que está muy difícil si no tenés el apoyo de un gobierno o del sector privado. Y se nota mucho en los presupuestos entre los de arriba y los de abajo, que hacen un esfuerzo sobre humano y es para felicitarlos, pero eso tiene su límite. Entonces, que aparezcan estas franquicias que apuesten a la Liga, paguen salarios adecuados y tengan estadios acordes, es lo que necesita la Liga para seguir creciendo. Y, también, nos sirve a nosotros como jugadores.
—Son debutantes, con un plantel de nombres importantes. ¿Qué exigencias pueden tener a mediano plazo? ¿Les tendrán paciencia en caso de no ganar seguido?
—Creo que van a tener paciencia, porque es todo nuevo. Sumamos dos fichas extranjeras que no tuvimos en el Súper 20 y se armó un equipo largo, con experiencia. Tendríamos que estar entre el 10/12. Pero la Liga te termina poniendo donde te merecés. Es un equipo para ilusionarse con algo lindo.
“Como decía León (Najnudel), la Liga la juega el que puede y no el que quiere. Hoy si no tenés apoyo de un gobierno o privado es muy difícil”.