La Nueva

Cielo, el dibujante pringlense furor en las redes, va por su segundo libro

Su historieta más popular, Paloma y Arturo, tiene como protagonis­tas a una niña de la calle y su perro. A partir del éxito de la tira lanzó su primera publicació­n: Un perro y una Flor. Ahora trabaja en un proyecto sobre historias de gente común.

- Anahí González Pau agonzalez@lanueva.com

Desde que el pringlense Cielo Joaquín Castro se mudó a Capital Federal y comenzó a compartir sus dibujos e historias por las redes el número de personas que siguen su trabajo no paró de crecer: hoy tiene 65 mil seguidores en Instagram, escribió un libro y va por el segundo.

“Mi idea es armar el libro con relatos cortos, escenas que veo en la calle de la gente común. Obviamente tratando de graficarlo­s en la mente del lector”, manifestó.

“Ya tengo material y lo estaré combinando con un dibujito de Paloma y Arturo. Creo que va a ser algo bastante diferente y por eso estoy muy entusiasma­do”, dijo.

Paloma y Arturo, su creación más popular, dio lugar a la publicació­n del libro Un perro y una Flor, que lleva varias ediciones. Tiene como protagonis­tas a dos amigos inseparabl­es, una niña en situación de calle y su perro, quienes reflexiona­n sobre la vida, el amor, la amistad, la soledad, el dolor y otros temas que generan un tremendo feedback con sus lectores.

“Los personajes fueron cambiando pero jamás perdieron ni perderán su esencia. Creo que el cambio se ve más que nada por los materiales que uso al pintar y dibujar”, comentó.

“Como les pasa a todos aquellos que hacen algo de manera artesanal, vas mutando un poco con la práctica. Quizás los personajes se ven un poco mejorados en el sentido de su anatomía, pero más que eso no cambiaron”, confió.

Cielo, quien de chico re- partía el diario por las calles de Pringles, y se fascinaba con las historieta­s de las contratapa­s, trabaja con materiales como acuarelas, acrílicos y lápices pasteles.

“Combinados me resultan muy agradables y quedo muy conforme. Aunque mi mayor placer es el proceso, el resultado estético no es de tanta importanci­a para mí”, admitió.

A través del trabajo que comparte, le llegan muchos pedidos de la gente. Le encargan cuadros, agendas, el libro y reaccionan con cientos de cálidos mensajes ante cada nueva publicació­n.

“¡La gente es lo más! Me llegan muchos mensajes de agradecimi­ento por lo que hago y ahí es cuando uno se da un poco cuenta hasta dónde puede llegar un simple párrafo a tiempo”, destacó.

Para Cielo o Cielito, como le decían su mamá y sus hermanas (fue el primer y único hijo varón hasta que llegó su hermano más chico) hay mucha gente necesitand­o de este tipo de expresione­s en que los sentimient­os se ponen de manifiesto a través de personajes y relatos.

“La respuesta de la gente es la culminació­n de un lindo trabajo. Estoy muy agradecido por eso. E muy importante para mí. Los pedidos siguen y, como todo, hay momentos que más y otros que menos. Pero se ve la interacció­n de la gente y cada vez más”, aseguró.

Cielo vuelca en el papel, a

Sus redes son: en IG, @octubre pinturas y @cielojoaqu­incastro. En Facebook, PalomayArt­uro.

través de dibujo y en las letras, situacione­s en las que desnuda sus emociones, se hace preguntas y ensaya respuestas y caminos en base a experienci­as personales.

Siempre fue muy sensible y perceptivo. De chico sentía que lo que hacía, sus originales diseños, eran vistos como “cosas raras” y le parecía que su personalid­ad no coincidía con las expectativ­as que la mayoría de la gente, quienes esperaban más que jugara al fútbol que verlo inventar banderas y logos.

“Creo que la mayoría de la gente se ve identifica­da con la verdad y claridad. No estoy diciendo que yo soy un portador de la verdad, sino que los dibujos y los textos sobre una confesión sincera, una frase que demuestra y dice algo sobre el amor propio, el perdón, el dolor y la verdad, son los que reciben más respuestas. Los sentimient­os simples”, señaló.

“Siento que la gente está un poco cansada de tanta incertidum­bre, tanta insegurida­d en todos los ámbitos y estamos todos un poco rotos. Las cosas simples son las que más necesitamo­s y la actualidad nos hace olvidar de eso. Es triste un poco, pero lo percibo así”, dijo.

El dibujante es 100 % autodidact­a y no realiza cursos de formación por una causa: disfruta de descubrir su estilo a medida que produce.

“No busco aprender a dibujar usando técnicas de otros, ya vistas, ya inventadas. No busco escribir con las reglas de la poesía, su estructura y demás. Busco hacer exactament­e lo que siento en el momento que lo siento y no creo que una técnica me sirva demasiado”, explicó.

“Mi única técnica es dejarme llevar sin compararme absolutame­nte con nadie. Quiero ver en el papel, exactament­e todo lo que tenía dentro en ese momento”, reflexionó.

Buenos Aires cada vez le gusta más y le hubiera encantado haberse mudado antes.

Para el autor lo más lindo de ser trabajador independie­nte es poder sentir algo de libertad y lo más complicado es organizars­e.

“Si uno no se organiza, no lo disfruta. Porque el tiempo no te alcanza jamás. Y también hay que saber superar la irregulari­dad, ya sea económica o la que sea, hay que saber llevarla”, analizó.

“Tengo un impediment­o enorme a llamarme o considerar­me artista. Aún no sé muy bien por qué”, admitió.

No tiene una estrategia para ganar seguidores en las redes. Quienes lo siguen es porque de forma genuina aprecian su trabajo.

“Sé que hay varias formas de ganar seguidores, incluso hay gente que da cursos y demás pero no me parece interesant­e para mí. Siempre tuve la idea de que uno debe vender lo que hace y no hacer lo que se vende o está de moda”, dijo.

“Yo simplement­e disfruto de lo que hago. Y si eso atrae a la gente, excelente, y si no está perfecto también. Las redes sociales son un arma de doble filo aunque usándolas para comunicar y expresar de manera honesta son una herramient­a increíble”, concluyó.

 ?? ??
 ?? ??
 ?? ?? CIELO JOAQUÍN Castro, en pleno proceso creativo.
CIELO JOAQUÍN Castro, en pleno proceso creativo.
 ?? ??

Newspapers in Spanish

Newspapers from Argentina