Un gran desafío para la próxima gestión comunal
Las instalaciones del ex Mercado Municipal ofrecen un abanico de posibilidades que las autoridades deberán estudiar y aprovechar.
A POCO de cumplirse un año de su cierre, el espacio donde durante cincuenta años funcionó el Mercado Municipal –ubicado en Donado 151, en pleno centro de nuestra ciudad— finalmente quedará completamente desocupado, una vez que se concrete el traslado de los últimos locales que todavía funcionan en el mencionado lugar.
MÁS ALLÁ de seguir parcialmente en funcionamiento, el municipio bahiense fue llevando adelante obras que, señaló, apuntan a generar seguridad –por caso el retiro de la estructura metálica de la fachada—, así como el desmontaje de paneles interiores y otros elementos potencialmente perjudiciales, y que son los que generaron en primer término la necesidad de trasladar los comercios que funcionaban en el lugar.
POR OTRA parte, se anticipó que comenzará a convocar las licitaciones para la construcción de las nuevas instalaciones eléctricas, así como de como de gas e incendios, las cuales estaban en condiciones precarias y lejos se encontraban de cumplir con las normativas de seguridad adecuadas para este tipo de edificaciones.
QUEDARÁ ENTONCES por definir un tema que no es en absoluto menor: el destino del lugar, tanto en su interior como en los locales que dan a las calles perimetrales.
EL CAMBIO de administración municipal a verificarse antes de terminar el año supone, entre muchas otras cosas, que los nuevos funcionarios en ejercicio tendrán que decidir cuál será el uso específico más conveniente, tanto para los vecinos como para la ciudad en general, teniendo en cuenta que se trata de una ubicación estratégica en un sector que se viene potenciando desde lo urbano y que ofrece grandes posibilidades.
POR CASO, se han peatonalizado las cortadas del lugar, lo cual las convierte en lugares por los que es posible pasear y esparcirse, y se está interviniendo en el eje de las calles BelgranoDonado con el ensanche de las veredas de manera de favorecer su funcionamiento, creando una suerte de centro comercial céntrico a cielo abierto.
EN ESE contexto integral, sería interesante no sólo pensar en recrear un mercado, sino en barajar ideas que puedan reconvertir al sitio en un lugar de encuentro y esparcimiento, que no se muestre aislado de un entorno que tiene un importante potencial para poner valor todo el sector.