Pugnaloni se graduó a nivel nacional y anotó su nombre en la historia grande de Villalonga
El joven volante logró una memorable victoria semanas atrás en el mítico Oscar y Juan Gálvez de Buenos Aires, en la cada vez más competitiva Clase 3 del Turismo Pista. Con equipo propio, Tomi y los suyos plantean férrea batalla a los mejores.
illalonga, cuna de campeones. Cuántas veces habremos escuchado esa frase, merced a los cuantiosos y grandes logros deportivos automovilísticos de aquella región.
Días atrás, el joven Tomás Pugnaloni (25) tuvo el privilegio de anotarse en esa prestigiosa lista y de devolverle a la localidad fierrera ese catálogo mencionado, quizás algo perdido en los últimos años.
Con un equipo íntegramente local, Tomi consiguió su primer galardón en el automovilismo nacional, nada menos que en el Turismo Pista, una de las especialidades argentinas con mayor coeficiente de competitividad actual.
“Me di cuenta de lo hecho con todos los mensajes que llegaron, que me llevaron mucho tiempo contestarlos de la cantidad que hubo. Mucha gente compartió la carrera y estuvo siguiendo lo ocurrido, y no solo de Villalonga. Y eso entusiasma mucho, hace muy bien al corazón y reconforta por todo el sacrificio que estamos haciendo”, contó Pugnaloni.
“Escribir mi apellido en la historia automovilística de Villalonga es increíble, como también devolverle al pueblo un poco de alegría, que hacía tiempo no lograba una victoria en el ámbito nacional (NdR: el último, su coterráneo Juan Kreitz). Ni hablar de estar en esa lista con tantos nombres y apellidos ilustres”, agregó.
Si algo magnifica aún más lo hecho por Tomi, quien encontró la victoria en la Clase 3 a escasos metros del banderazo, en un electrizante e infartante
Vcierre, fue el escenario de turno; el mismísimo Oscar y Juan Gálvez de Buenos Aires, la cuna del deporte motor en el país.
“Encima se dio en este circuito tan especial (NdR: el trazado N°8), que representa el escenario de pruebas de la mayoría de los equipos capitalinos, y eso eleva más todavía el mérito para nuestro equipo, que desde bien abajo llegó a pelear bien arriba”, puntualizó Tomi, quien tripula un Renault Clio de su propio equipo, el MS Sport, con Mauro Seitz a la cabeza.
“Todos esperaban con ansias esta carrera, por lo que representa Buenos Aires y lo que en sí era estrenar el asfalto del circuito. Empezamos no tan bien, porque particularmente me costó mucho adaptarme al manejo, pero las cosas se fueron dando para mejor y finalmente nos quedamos con este trofeo que tanto querían todos”, contó Tomi.
—¿Cuándo caíste en lo que estaba pasando?
—En el momento de la vuelta final me largué a llorar, fue emocionante. Y cuando me bajé y vi al equipo me emocioné más todavía, porque ahí realmente valorás todo el esfuerzo y sacrificio que se hace para poner un auto de carreras en pista. Es doblemente gratificante hacerlo así, con tu propia gente y apostando a un proyecto propio.
“Hablando con Mauro (Seitz), por un lado cuesta entender todo lo que pasó y cómo llegó la posibilidad de ganar, y, por el otro, nos muestra que evidentemente, si se dio, y más con los resultados de carreras pasadas (NdR: venía de un 5° puesto y conseguir una Pole), estamos en condiciones de hacerlo”, remarcó.
El mérito de sobrevivir
Un cúmulo de situaciones coincidieron para que Tomi, quien cuenta con una carrera en TN (Toay 2018), llegue a lo más alto del podio, lo que, erróneamente, supone pensar que la suerte hizo todo el trabajo.
En una categoría tan inpredecible e ingrata como el Turismo Pista, permanecer y destacarse en modo “superviviencia” no deja de ser un aspecto sumamente meritorio .
“La tranquilidad y el saber aprovechar los momentos fueron dos aspectos claves. Pasé muy pocos autos durante la carrera, fueron más los despistes y abandonos que los sobrepasos. Pero para todos, en estas finales, mantenerse en pista y no sufrir ningún percance, por lo ásperas que suelen ser, también es meritorio”, recalcó Pugnaloni, 10° en el campeonato.
“Fue una carrera áspera, aguerrida, con mucha exigencia en lo conductivo, y también para el equipo en cuanto a lo mecánico. Obviamente que la victoria fue inesperada (largó 18°), apenas nos conformábamos con estar en el Top Ten; pero también hay que saber estar y aprovechar cuando las circunstancias se prestan”, aclaró.
—¿Podría decirse que el Turismo Pista está a la altura del TN?
—Yo creo que sí. Los que salen de acá van al TN y funcionan rápido inmediatamente, lo estamos viendo en la actualidad con varios pilotos. Y a los que bajan para competir con nosotros se les hace muy difícil ser competitivos de entrada, eso habla muy bien del nivel que mostramos, además del gran momento, con 50 autos por carrera y una paridad tremenda.
“Poder ir a correr, como hacemos nosotros, con un equipo propio y chico, haciendo todo en Villalonga y con aspiraciones de ganar como nos pasó, es una de las mejores cosas que tiene el Pista. No necesitamos depender de nadie, de la forma en que lo hacemos podemos batallar y eso es más especial todavía”, expresó.
—¿Cambian los objetivos?
—Cambiaron un poco. Por cómo se presenta el panorama ahora, personalmente me gustaría poder pintar un solo dígito para la próxima temporada. Estamos muy cerca de eso, pero hay que sumar muchos puntos en estas dos carreras que quedan, que además otorgan puntaje especial. Inicialmente apuntábamos al podio y ahora ya nos sacamos esa mochila.
“Escribir mi apellido en la historia deportiva de Villalonga es increíble, como también poder devolverle al pueblo un poco de alegría.”
“Personalmente me gustaría pintar un solo dígito al finalizar la temporada. Estamos muy cerca, pero hay que sumar en las dos que quedan.”