Las escuelas bahienses tendrán 190 días de clases durante el ciclo lectivo 2024
Los niveles inicial y primario comenzarían el 26 de febrero y el secundario arrancaría el 4 de marzo.
Con el objetivo de alcanzar los 190 días de clases efectivos durante el ciclo lectivo 2024, los alumnos de nivel inicial, primario y secundario retornarían a las aulas entre la última semana de febrero y la primera de marzo.
En su última reunión, el Consejo Federal de Educación (CFE) que aprobó la resolución que fija el calendario escolar para el ciclo lectivo 2024, el cual tendrá al menos 190 días de clase efectivos en las 24 jurisdicciones educativas, y que crea una comisión de seguimiento para el cumplimiento de esa medida.
La resolución encomienda además a la Secretaría de Evaluación e Información Educativa la elaboración de un dispositivo tecnológico de información digital que permita la identificación y el registro de los días de clase cumplidos y no cumplidos según los datos que notifiquen las jurisdicciones.
De este modo, aunque aún no está definido, los alumnos de nivel inicial y primario comenzarían el 26 de febrero y finalizarían el 20 de diciembre.
En tanto, los estudiantes del secundario, en todas sus modalidades, empezarían el 4 de marzo, tras las mesas de examen.
Los docentes, por su parte, volverían a las aulas el 7 de febrero para planificar, capacitarse y realizar reuniones de equipo.
Por otra parte, las vacaciones de invierno 2024 serían del 15 al 26 de julio.
“La Ley Nacional 25864 pauta 180 días de clases para el ciclo lectivo en todo el país. Pero en su última reunión, el Consejo Federal de Educación estableció el cumplimiento de, al menos, 190 días para el ciclo lectivo 2024, entre otros considerandos”, confirmó el licenciado Claudio Martini, titular de la Jefatura Regional de Educación N°22, que abarca además de nuestra ciudad a los distritos de Patagones, Rosales, Monte Hermoso y Villarino.
Y añadió: “Se trata sin dudas de una ampliación y profundización de lo que entendemos, desde el estado nacional y provincial, como calidad educativa que incluye condiciones socioeconómicas, análisis del sistema educativo en su conjunto, condiciones materiales, acceso a las tecnologías y existencia de materiales didácticos, etc. La calidad asociada a la justicia social, la inclusión y la igualdad, más enseñanza y
“Se trata sin dudas de una ampliación y profundización de lo que entendemos como calidad educativa". (Martini).
más aprendizajes”.
El CFE encomendó registrar y realizar un seguimiento de los motivos por los que pueda producirse la pérdida de días de clase y de las medidas adoptadas por sus autoridades para garantizar su cumplimiento, tales como el control de asistencia y salud laboral, el financiamiento y el fortalecimiento de la infraestructura escolar.
“Tal como sostiene el director Alberto Sileoni, debemos mejorar los aprendizajes en todas las disciplinas y todos los niveles, además de evaluar a los educadores, lograr el cumplimiento efectivo del calendario escolar, mejorar las condiciones de enseñar y aprender, incorporar a las familias y así concretar la inclusión de calidad como política de Estado”.
“Por ello es necesario problematizar la queja, lograr un equilibrio entre el lugar en el cambio y los cambios en el lugar. La gramática escolar actual incorporó cambios culturales basados en la ampliación de derechos, perspectiva de género y abordaje de la ESI en forma transversal. Estamos construyendo una nueva forma de habitar la escuela con obligaciones, pero desde la convicción que la educación es un derecho para todos y todas”, agregó Martini.
Por otra parte, el Consejo trabajó también sobre el proyecto de resolución que promueve la inclusión de la perspectiva de la educación ambiental integral en las propuestas curriculares.
La educación ambiental integral concibe lo ambiental como una construcción social e histórica y en vínculo con la formación de una ciudadanía democrática en el marco de los derechos humanos.
La resolución presentada en el CFE promueve los siguientes ejes transversales para la implementación de la educación ambiental integral, elaborados sobre la base de los compromisos a los que el Estado nacional suscribe a nivel mundial, que son: reconocer la complejidad del ambiente, analizar los problemas ambientales, ejercer nuestros derechos, generar un diálogo de saberes, y cuidar el ambiente y la sustentabilidad de la vida.
“Si pensamos en el ciclo lectivo 2024, vamos a proyectar y diseñar un tiempo de profundización de la enseñanza, con la certeza de reponer, resignificar y profundizar saberes. Intensificar la enseñanza en lo niveles y modalidades es nuestro gran desafío como artífices de los cambios y ello se da con otros y otras en equipo”, opinó Martini.
“Tal como define la UNESCO, la calidad como concepto complejo y multidimensional integrado por cuatro grandes aprendizajes: aprender a conocer, aprender a hacer, aprender a convivir con los demás y aprender a ser. Resulta clara la afirmación de que la calidad educativa debe integrarse con otras dimensiones además de la eficacia y la eficiencia asociadas al logro de los aprendizajes cognitivos de los alumnos”.