Las lesiones inofensivas o lunares podrían ser un “signo de alarma”
El año pasado, a 1 de 4 personas los médicos le encontraron alguna lesión sospechosa. El mayor número de hallazgos se ubicó en la zona del tronco.
os especialistas buscan concientizar sobre el daño en la piel que causa la exposición solar bajo la consigna de que cualquier lunar que pueda parecer inofensivo también puede representar “un signo de alarma”.
La Sociedad Argentina de Dermatología (SAD) pone el foco en la prevención ya que, explicaron desde esa entidad, el cáncer de piel “es el más común y el que mayor posibilidad de cura tiene, si se detecta a tiempo”.
L“Los lunares son lesiones benignas presentes en la mayoría de las personas. Su número es variable; pueden ser escasos o múltiples, y se sabe que las personas con más presencia de lunares pueden tener mayor probabilidad de desarrollar cáncer de piel”, manifestaron los médicos de la SAD.
En un análisis detallado sobre chequeos realizados el año pasado, a 1 de 4 personas los médicos le encontraron alguna lesión sospechosa y el mayor número de hallazgos fueron ubicados en la zona del tronco.
Por eso, los expertos en el tema destacaron la importancia de “aprender a realizar un autoexamen para conocer el tipo de mancha o lunar y estar atentos a los cambios”.
“El cáncer de piel es desde hace tiempo unos de los más frecuentes y los casos han ido aumentado en las últimas décadas”, explicó Carla Minaudo, integrante de la Sociedad Argentina de Dermatología.
Minaudo advirtió que las variedades menos peligrosas como el carcinoma de células basales y el carcinoma espinocelular constituyen la mayor parte de los casos, pero alertó que se está incrementando el melanoma que es mucho más raro, pero de mayor mortalidad.
“El 80% de las muertes por cáncer de piel se deben a melanoma”, precisó y agregó que si la tendencia se mantiene “se espera que los casos de melanoma aumenten un 50% de aquí al 2040”.
Hace poco se realizaron chequeos gratuitos en los centros de salud de todo el país promoviendo la revisión de lunares con un especialista en dermatología.
“Estamos felices de este proyecto de la Sociedad Argentina de Dermatología que creció año tras año, logrando llegar a pacientes de todos el país, podemos así diagnosticar y concientizar a la población sobre la importancia de los cuidados para la prevención del cáncer de piel”, dijo la médica Ana Clara Acosta, quien agregó que, “como dermatólogos realizamos este trabajo a diario pero se intensifica periódicamente en todo el país de manera gratuita”.
Según la Organización Mundial de la Salud (OMS) en un informe publicado en 2020, la radiación solar genera aproximadamente 1.5 millones de cánceres al año, y a partir de un estudio realizado por la SAD en 2022, solo el 40% de los encuestados se protege del sol “a veces” y el 62,7% no renueva la protección solar durante el día.
Además, para los especialistas, el calentamiento del planeta podría incrementar los casos de cáncer de piel, ya que, “el aumento de temperaturas hace que la personas salgan más tiempo al aire libre y durante más tiempo, exponiéndose por demás a la radiación ultraviolenta”.
Por eso, los dermatólogos insistieron en seguir las recomendaciones todo el año, pero fundamentalmente durante los meses
Los dermatólogos insisten en seguir las recomendaciones todo el año, pero fundamentalmente durante los meses de verano.
de verano.
Para ello difundieron la regla del ABCDE: A (analizar si los lunares son asimétricos), B (chequear si sus bordes son irregulares), C (contemplar la coloración, si es variada y si hay cambios de color), D (prestar atención al diámetro, si son mayores a 6 mm), E (estudiar su evolución: si crecen o cambian, hay picazón, sangrado o costras).
Entre las sugerencias, aconsejaron observar la piel, revisar zonas ocultas como el cuero cabelludo, o zona genital, y pedir ayuda para evaluar zonas como la espalda, para poder reconocer si alguna mancha o lunar es nuevo o cambió.
Por otro lado, entre las claves para proteger la piel del daño solar aconsejaron usar prendas de vestir que cubran zonas delicadas como rostro, brazos y la zona del pecho.
También, aplicar abundante protector solar de amplio espectro con FPS (factor de protección solar) superior a 30, y en caso de pieles blancas, de 50 o superior, y evitar, en lo posible, la exposición solar entre 10 y las 16 cuando los rayos ultravioletas son más intensos.