Sebastián Piñera: ícono de la derecha y antagonista en el estallido social de Chile
El exmandatario fue exaltado por su gestión en momentos decisivos durante sus períodos presidenciales, como la reconstrucción tras el terremoto de 2010 y el rescate de 33 de mineros, en Atacama.
El mundo despidió a Sebastián Piñera, primer presidente de derecha en la era democrática de Chile. La muerte del exjefe del Estado chileno tomó por sorpresa a toda la región cuando las autoridades de Lago Ranco, en la región sureña de Los Ríos, informaron sobre un helicóptero accidentado en la zona.
Momentos después se supo que Piñera era el piloto de la aeronave y que fue el único de los cuatro ocupantes en perder la vida.
“En el helicóptero iban cuatro tripulantes, tres de ellos pudieron llegar por sus propios medios a la orilla, están fuera de peligro. Pero no fue el caso del cuarto tripulante, que es el expresidente Sebastián Piñera. La Armada pudo llegar al lugar del accidente y recuperar el cuerpo”, confirmó Carolina Tohá, ministra del Interior chilena.
Presidente de Chile en dos periodos (2010-2014 y 2018-2022), Sebastián Piñera quedará en el recuerdo colectivo en el ámbito internacional por su postura neoliberal en la apertura de la economía chilena, los esfuerzos en la reconstrucción del país tras el terremoto de 2010, el protagonismo de su figura en las protestas masivas de 2019 y su manejo de la pandemia de Covid-19 al final de su segundo mandato.
Negocios y política
Nacido en Santiago el 1 de diciembre de 1949, Sebastián Piñera era hijo de Magdalena Echenique Rozas y José Piñera Carvallo, miembro activo del Partido Demócrata Cristiano y exembajador en Bélgica y la ONU durante el periodo presidencial de Eduardo Frei Montalva (1964-1970).
Formado en una familia privilegiada, Piñera cursó sus estudios superiores en la Pontificia Universidad Católica de Chile, donde completó la carrera en ingeniería comercial. Años después, en 1973, emigró a Estados Unidos para ingresar a una maestría en la
Universidad de Harvard, donde también realizó un doctorado.
Padre de cuatro hijos con su pareja, Cecilia Morel, Sebastián Piñera se convirtió en uno de los hombres más ricos de América Latina, acumulando una fortuna de unos 2.900 millones de dólares, según la revista Forbes.
Entre sus negocios más exitosos se encuentran ser el principal accionista de la aerolínea Lan Chile (ahora Latam), del canal de televisión local Chilevisión y en “Blanco y Negro”, sociedad anónima que controla al Colo Colo, uno de los clubes de fútbol más populares en el país.
Su vida política inició en 1988, cuando hizo público su voto en contra de la dictadura de Augusto Pinochet. Dos años después, en 1990, participó en la fundación del partido derechista Renovación Popular, que traía al conservadurismo, marcado por la sombra de la dictadura, a la vida pública en la democracia.
“Recuerdo perfectamente bien que en ese tiempo muchos de mis amigos y de quienes hoy me apoyan no compartieron mi decisión. Pero la mantuve firme”, expresó Sebastián Piñera durante una entrevista en 2010.
Luego de tres días de velatorio, misas y homenajes, los restos de Sebastián Piñera (74 años) fueron inhumados ayer en el cementerio Parque del Recuerdo de Huechuraba.
Terremoto y mineros
Su camino rumbo al Palacio de la Moneda, sede del Ejecutivo chileno, no fue fácil. En 2005, Piñera se lanzó por primera vez como candidato presidencial de la derecha tradicional, logrando solamente el 26,42% de los votos.
El derechista volvió a intentarlo en los comicios presidenciales de 2009, donde consiguió meterse de lleno en la carrera obteniendo el 44% del favor electoral y entró a la segunda vuelta con su competidor más cercano, Eduardo Frei Ruiz-Tagle. Piñera resultó victorioso, con el 51% de los votos, asumiendo la Presidencia el 11 de marzo de 2010.
Pero, un mes antes de jurar como presidente, Chile sufrió uno de los peores terremotos en su historia, lo que obligó a Piñera a cambiar radicalmente su plan gubernamental para enfocar sus esfuerzos en impulsar la reconstrucción y el apoyo social a las víctimas.
En agosto del mismo año, las miradas del mundo volvieron a posarse sobre Chile, después de que se reportara que 33 mineros habían quedado atrapados en un socavón dentro de la mina San José, en el ríspido desierto de Atacama. Fueron 69 días en donde el Gobierno de Piñera tuvo que poner marcha forzada a los esfuerzos de rescate, protagonizando una de las historias más dramáticas del año.
“Esto salió hoy día de las entrañas de la montaña, de lo más profundo de esta mina y es el mensaje de nuestros mineros que nos dicen que están vivos, que están unidos. Solo puedo decir en un momento de tanta alegría: ¡Viva Chile!”, exclamó el entonces presidente tras recibir un papel de los mineros que rezaba: “Estamos bien en el refugio los 33”. (France 24).