La Nueva

El lugar es sitio elegido por cientos de personas que se arrojan a las aguas. Ahora se busca evitar esa práctica.

- Mario Minervino mminervino@lanueva.com

oda obra de arquitectu­ra busca dar respuestas a las necesidade­s que suponen su uso y destino. Pero sucede a veces que, una vez puesta en servicio, se deben atender situacione­s inesperada­s, difíciles

Tde prever.

Un componente singular por su calidad de trágico es el que aparece cuando la gente elige una obra como lugar de suicidio, un uso dramático que no puede ignorarse y que exige idear adecuacion­es que apunten a evitar esa práctica. Un sitio icónico que sufre ese destino es el mítico puente Golden Gate de San Francisco, en los Estados Unidos, construido en 1933, de 3 kilómetros de largo y un estilo art decó se impone en el paisaje con su color naranja rojizo.

El puente ha sido un punto de suicidios desde su inauguraci­ón, personas que se arrojan desde los 75 metros que separan la estructura del agua. El año pasado finalmente se adoptó una medida considerad­a adecuada, con el agregado de redes a ambos lados del puente.

El detalle

Las redes son de acero inoxidable, están ubicadas seis metros debajo de la acera y en voladizo otros seis metros, suspendida­s por brazos de acero pintados de rojo. Las personas que saltan quedan retenidas en esas redes, de donde pueden ser rescatadas.

“Es un diseño probado, que disuade a la gente de saltar. Es un símbolo de atención y esperanza para las personas abatidas”, señalaron los encargados de la obra. Se informó además que el sistema funciona ya que menos de la mitad del promedio de personas murieron durante 2023.

La obra se demoró porque hay quienes cuestionab­an su colocación por cómo afectaría la estética naturaleza del puente. También fue un inconvenie­nte el costo de la instalació­n, estique mado en 224 millones de dólares.

El Golden Gate no es la única obra donde se repiten los suicidios. El Vessell, en Nueva York, una pasarela inaugurada en 2019 debió cerrar dos años después.

El Viaducto Príncipe Edward, en Toronto, fue rodeado de una barrera de 9.000 barras de acero mientras que al Viaducto de Segovia, en Madrid, España, se le colocó una baranda de cristal.

Otro lugar, complejo de controlar, es el Metro de Londres, con un promedio de 150 suicidios anuales, ante lo cual se han colocado barandas.

 ?? ??

Newspapers in Spanish

Newspapers from Argentina