Estudian una mejoría en los tratamientos de cáncer de vejiga
Científicos argentinos avanzan en la investigación. Los ensayos registran un 60% de respuestas “favorables”.
ientíficos del Conicet y de la Fundación Sales avanzan en mejorar los tratamientos para el cáncer de vejiga, que actualmente registran un 60% de respuestas “favorables” en pacientes que padecen este tipo de enfermedad, que se encuentra entre los 10 más prevalentes en el país.
El cáncer de vejiga, que se produce cuando las células que conforman este órgano crecen de forma descontrolada, se encuentra entre los 10 tipos más prevalentes en la Argentina, con una relación de 4 a 1 entre hombres y mujeres, según los datos del Ministerio de Salud de la Nación.
CEn 2021 se registraron 3.785 nuevos casos en el país.
Si bien en la actualidad para este tipo de cáncer existen terapias durante la etapa que no invade el músculo de la vejiga, “solamente el 60% de los pacientes responde de forma favorable al tratamiento”, sostuvo la Fundación Sales.
En ese contexto y dado que “no existen métodos para evaluar a los pacientes”, la doctora en biología Marcela Barrio, investigadora del Conicet y de Fundación Sales, junto al becario bioquímico José Mellado, impulsaron una investigación con el objetivo de poder “predecir qué pacientes responderían a las terapias actuales y cuáles no, para poder buscar otros tratamientos”.
La forma más difundida de tratar el cáncer de vejiga es mediante el Bacilo de Calmette Guerin (BCG), una solución que estimula el sistema inmunitario.
El objetivo general de la investigación, según los expertos, es “detectar biomarcadores evaluados antes o tempranamente en el tratamiento”.
Sin embargo, una gran proporción de pacientes con este tipo de cáncer “no responden favorablemente a esta terapia”, precisaron.
Asimismo, se observa que existe “una alta tasa de recaída”, que deriva en la progresión de la enfermedad.
“Este alto riesgo de recurrencia y progresión justifica el monitoreo y el tratamiento de rutina de por vida, por lo que representa uno de los cánceres más costosos de tratar y una carga importante en los gastos de la atención médica”, explicó Barrio.
El objetivo general de la investigación, agregó la experta, es “detectar biomarcadores evaluados antes o tempranamente en el tratamiento, para identificar a los pacientes que podrían responder y por lo tanto ser tratados con BCG, o bien ser tratados con otras terapias intravesicales alternativas o tratamientos más definitivos como la cistectomía radical, que es la extracción de la vejiga, ante el riesgo de progresión”.
A partir del estudio de biopsias de pacientes con cáncer de vejiga tratados con BCG intravesical, el equipo liderado por Barrio pudo “establecer que la presencia de ciertas poblaciones de linfocitos T que infiltran los tumores, previo al tratamiento, se asocia con la respuesta a BCG”.
“Actualmente estamos trabajando con nuevas biopsias tumorales para validar los resultados previos”, acotó sobre el estudio para dar con los factores predictivos de respuesta a este tratamiento.