La mirada del otro
La tribu cinéfila anda revoloteada. El gran Wong Kar-wai, mito del mejor cine de autor, ha decidido dar el salto al universo de las series y en estos días está filmando Blossoms Shanghai, una fábula onda “Gran Gatsby” sobre el ascenso y caída de un millonario chino en la década de los 90. Dorados tiempos de capitalismo en expansión, cuando las epidemias globales solo aparecían en la ciencia-ficción. Nacido en Shanghai y criado en Hong Kong, Won Kar-wai tuvo un flechazo con la Argentina de chico, a través de los libros de nuestro Manuel Puig. En 1997 estrenó Happy together (Felices juntos), una peli que filmó acá, con un rodaje caótico en el que abundaron los accidentes y las deserciones. Aunque no es su filme más celebrado (probablemente sea Con ánimo de amar, del 2000), es por lejos mi favorito. Recuerdo entrar tarde al cine, con la cinta empezada, buscando a tientas una butaca, mientras en la pantalla estallaba la primera escena, un primerísimo plano de dos chinos besándose furiosamente. En Happy together, Wong Kar-wai narra la travesía de una pareja homosexual de Hong Kong que escapa hacia las antípodas con la ilusión de que la aventura salve lo que queda del amor. Una quimera al cabo inútil, que los lleva de las cantinas de La Boca a al faro del fin del mundo, de las cataratas del Iguazú a la helada llanura pampeana. Algo maravilloso de la película es la forma en que Wong Kar-wai retrata una Argentina que está ahí pero que no vemos. Captura, en esos paisajes, una poesía que los que nacimos acá somos incapaces de percibir. La mirada del otro, del extraño. Lo cotidiano se vuelve mágico.
Desde su estreno, a fines de 2020, Bridgerton se convirtió en un boom mundial. Además de la cautivante historia de amor entre sus protagonistas Simon y Daphne, los fans de la serie se enamoraron también de la banda de sonido, con esas reversiones tan particulares de hits actuales como “Thank U, Next” de Ariana Grande o “Girls Like You” de Maroon 5, que sonaban en formato de música clásica para ambientar las escenas de baile del programa, en esos majestuosos salones de 1813. El creador detrás de esas canciones es Vitamin String
Quartet ( VSQ), un proyecto que reúne a varios cuartetos de cuerdas desarrollados y producidos por CMH Label Group, una compañía discográfica independiente de Los Ángeles, y que desde 1999 se dedica a lanzar álbumes tributo de distintos artistas en versiones clásicas con violín, viola y violonchelo. Aunque tienen varios años de existencia, desde la llegada del soundtrack de Bridgerton tuvieron una explosión: el streaming de sus canciones creció un 350% y aumentaron en un 50% sus oyentes de Spotify. Todo un fenómeno. •
Las canciones que acompañan la serie son reversiones clásicas de canciones de artistas como Billie Eilish o Maroon 5. Sus creadores son Vitman String Quartet, un proyecto de cuarteto de cuerdas.