“Metí ganas y garra”
“Bebelo” Reynoso estaba en el umbral que muchos pibes no pudieron cruzar. Avanzó y, ahora, la “T” y él se necesitan. Es esperanza de fútbol.
Emanuel “Bebelo” Reynoso no puede dormirse. Es cierto que ya ganó varios “partidos”, pero en el Mundo Talleres no basta. Como hincha y jugador de inferiores, tuvo que volver a construir un camino que fuera lo suficientemente transitable para que el sueño de ser futbolista pudiera cumplirse. Aquel tiro en la rodilla marcó un antes y un después. Estaba parado en ese umbral que muchos pibes no pudieron cruzar, pese a tener un gran talento.
Le cambió la vida, en todo sentido, y “Bebelo” supo aprovecharlo. Avanzó, de verdad. Enriqueció su juego: la pegada y el panorama los tenía, pero le agregó orden; aprendió a ocupar una posición en la recuperación de la pelota y ahora debe mejorar su marca. Sigue siendo el volante que tiene un botín zurdo del que puede salir el fútbol que el equipo necesita. Ahí están, él y Talleres, necesitándose. Es el primer paso, restan más. Y el pibe lo sabe.
“El año pasado me sentí muy bien, cómodo, tranquilo y confiado. La verdad es que estoy muy contento. El año pasado finalmente pude superar todas las situaciones vividas en el pasado. Si no fuera por el apoyo de mi familia, los compañeros, el cuerpo técnico y los dirigentes, no sé si estaría viviendo este momento. Le metí muchas ganas y garra. Fue un año muy lindo. Ahora vamos por otro año mejor”, contó el volante a
Mundo D, al cierre del primer turno de entrenamiento en la pretemporada que el equipo realiza en la localidad de Salsipuedes.
“Bebelo” lleva el mate en una mano; en la otra, “el celu”. Pero nadie es tan inseparable como Pablo Guiñazú. “El Cholo” pasa al lado y lo mira nomás. Reynoso le debe tanto afuera como adentro, porque influyó, en serio, en su evolución personal y futbolística. Ya no es el “10” que sólo esperaba que le dieran la pelota y el mejor contrato; ahora es un jugador más completo, que sabe ocupar una posición ofensiva tanto como para recuperar la pelota.
“Llegar más y entregar al compañero mejor ubicado es tan importante como saber defender. A eso lo estoy aprendiendo. Y ‘el Cholo’ siempre está a mi lado. Me da muchos consejos. Otro que también me ayuda mucho es Leonardo Gil. Siempre me piden que marque y llegue al área. La verdad es que es un honor jugar al lado de ellos”, comentó “Bebelo”.
–Tocás dos veces la pelota en una jugada. Antes, estabas al principio o al final…
–Es jugar en Primera. Es difícil. Los equipos están por algo. Hay que moverse. Tener mucho ritmo. Para eso le estamos metiendo con todo en la pretemporada. Hay que lograr un buen ritmo y mantenerlo la mayor parte del juego. Ascacíbar, de Estudiantes de La Plata, fue el jugador que más me costó superar. Juega bien y marca de la misma manera. Me gustaría tener esa capacidad. No llegué a encararlo porque cuando la recibía, lo tenía atrás. Tenía que devolver la pelota. No me podía dar vuelta. Fue de los más difíciles.
–¿Cómo son tus diálogos con Kudelka?
–Me aconseja siempre. Juegue o no. Siempre me pide que juegue y que, a la hora de marcar, deje la vida, que me sacrifique. Trato de cumplir. Me ha ido bien.
–Vendrán los partidos con Independiente y Boca, los dos con Belgrano, con el campeón Lanús...
–Serán hermosos para jugar. Se trata de grandes equipos. Ojalá me toque jugar. Me estoy preparando para poder estar 10 puntos y a disposición del cuerpo técnico.
–¿Qué talla más: “el paso a paso”, el “podemos pelear por entrar a una copa o por el torneo” o “el si hacemos una buena campaña, una cosa lleva a la otra”?
–Partido a partido. Como hasta ahora. Es cierto que merecimos más, pero hay que seguir igual. Esta parte que queda del campeonato vamos a ir a partido a partido. Se vienen grandes rivales. Hay que meterle. Después se irá dando la situación y ojalá que podamos entrar a una copa o tratar de mantener el nivel.
La cabeza en la “T” –¿Has tenido ofrecimientos?
–Mi representante no me ha comentado nada. Solamente pienso en jugar. Hasta ahora, nada.
–¿Sabés de un interés del Valencia?
–Me lo comentaron algunos amigos. Que se sintió ese rumor. Pero hasta que no sea concreto o seguro, no me meto. Se lo dejo a mi representante Luis Grillo. Estoy con la cabeza en Talleres.
Y el club también tiene en mente a “Bebelo”. Es uno de las figuras del equipo, tiene el valor agregado de ser uno de los pocos jugadores propios que ha podido entrar en la preferencia de Kudelka y se ha vuelto popular en el Mundo Talleres. Cuando va a la sede, al pie de la escalera que desemboca en el primer piso hay una gigantografía en la que aparece junto con la de Gil. Llega y sale firmando autógrafos, como cuando va a una práctica o a un partido. Ese protagonismo es el que está aprendiendo a manejar…
“Estoy muy feliz. La gente me reconoce, me pide fotos. Lo llevo bien. Soy agradecido por eso y por el apoyo familiar”, dijo “Bebelo”.
–¿Cómo va la carpeta?
–Mi mamá me la hizo. Tiene recorte, fotos. Siempre me apoyó. La tiene guardada para que, después, cuando forme mi propia familia, se la pueda mostrar.