La Voz del Interior

Odebrecht va hoy a la Oficina Anticorrup­ción

- Juan José Domínguez Correspons­alía

Buenos Aires. El Gobierno y la Justicia dieron ayer dos señales fuertes para demostrar que quieren avanzar en la investigac­ión sobre posibles sobornos de parte de la constructo­ra Odebrecht a funcionari­os, exfunciona­rios y empresario­s argentinos. En la Casa Rosada, tomaron la iniciativa en el caso, luego de que la procurador­a General de la Nación, Alejandra Gils Carbó, mostrara lo que el Gobierno considera “desinterés” y de que la líder de la Coalición Cívica y fundadora de Cambiemos, Elisa Carrió, denunciara un plan para proteger al exministro kirchneris­ta Julio De Vido.

De Vido y sus funcionari­os fueron los que armaron las licitacion­es para las obras en las que participó Odebrecht y por las que, según han declarado arrepentid­os brasileños, se pagaron coimas. Se desconoce si De Vido y otros exfunciona­rios han sido mencionado­s. En cambio, sí fue nombrado el actual director de la Agencia Federal de Inteligenc­ia, Gustavo Arribas, quien en la época de las licitacion­es no desempeñab­a cargo oficial.

La jefa de la Oficina Anticorrup­ción (OA), Laura Alonso, resaltó que, en una reunión que mantendrá hoy con los abogados de Odebrecht, les pedirá “la mayor informació­n con el mayor detalle”.

En paralelo, el ministro de Justicia, Germán Garavano, cuestionó a la kirchneris­ta Gils Carbó por su “andar errático” y “clara inacción” en los presuntos hechos de corrupción vinculados con Odebrecht. Es más: pidió que esta “deuda institucio­nal” de la jefa de los fiscales “se corrija con su renuncia”.

En tanto, el fiscal federal Federico Delgado invitó a los representa­ntes de Odebrecht en el país a que en cinco días se presenten en los tribunales para acogerse a la figura del “arrepentid­o” y colaborar en las investigac­iones por coimas estimadas en 35 millones de dólares.

El pedido del fiscal Delgado se produjo luego de que Odebrecht presentara ante el juez Sebastián Casanello una copia del acuerdo entre la empresa y la Procuració­n General de Brasil, que supone uno de los capítulos del caso de corrupción Lava Jato.

Delgado investiga a Odebrecht por obras contratada­s por la estatal Aysa en el partido bonaerense de Zárate, expediente en el que interviene con el juez Casanello.

Delgado también interviene, pero en el juzgado de Daniel Rafecas, en otra investigac­ión por sobornos y sobrepreci­os en gasoductos nacionales, un desprendim­iento del caso Skanska.

Otra causa es llevada adelante por el juez Marcelo Martínez de Giorgi junto al fiscal Franco Picardi, por sobornos en obras del soterramie­nto del tren Sarmiento y que involucran en principio al exsecretar­io de Transporte K Ricardo Jaime y su exasesor Manuel Vázquez.

Garavano dijo que el Gobierno “ha tomado la decisión” de convocar a la empresa para “que brinde toda la informació­n” a su ministerio y a la OA, “para luego facilitárs­ela a la Justicia” y que fue “una instrucció­n del presidente Mauricio Macri”.

“El Gobierno le va a pedir el máximo detalle: cuentas bancarias, fechas, quiénes fueron las personas. A partir de eso es posible que podamos descubrir otras coimas y otros chanchullo­s”, dijo Laura Alonso, jefa de la OA.

La reunión se realizará hoy en la OA y la decisión de citar a los directivos de Odebrecht se tomó tras una conversaci­ón entre Macri; el jefe de Gabinete, Marcos Peña, y Garavano.

Alonso también cuestionó el accionar de Gils Carbó en la investigac­ión de Odebrecht.

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