Movilización.
Ambiente de la Provincia suspendió la audiencia pública que debía debatirlo, tras la controversia generada y un amparo judicial. El emprendimiento privado Mina Nácar preveía la extracción de cuarzo y de feldespato.
En Tanti, los vecinos debaten qué hacer ante la posible llegada de una mina en Los Gigantes.
La noticia de la apertura de una mina para extracción de cuarzo y feldespato en la zona del macizo Los Gigantes, en Punilla, despertó la inquietud de los vecinos de esa zona cercana a Tanti y de agrupaciones ambientalistas. En el marco de la controversia abierta, la Secretaría de Ambiente de la Provincia resolvió ayer suspender la audiencia pública en la que se preveía debatir este proyecto, el próximo martes 13.
Mina Nácar es el nombre del emprendimiento privado que se pretende instalar en el paraje El Cruce, sobre el ingreso a la Estación Meteorológica.
Tras la presentación de un recurso judicial de amparo ambiental por parte del Club Andino Córdoba, la Federación Cordobesa de Montaña y el ambientalista Ricardo Suárez, Ambiente resolvió sus- pender la audiencia pública.
El viernes pasado, un grupo de vecinos de Tanti se reunió en la plaza de esa localidad para informarse sobre el proyecto y establecer un plan de acción en oposición a la apertura de la mina. Allí, un referente de la Asociación Amigos del Río San Antonio, Juan Carlos Ferrero, señaló que detrás de este tipo de emprendimientos “siempre está el uranio”. Ese temor, además de los impactos de cualquier actividad extractiva minera, se instaló en la zona.
La explotación de uranio está totalmente prohibida desde hace años en toda la provincia, al igual que la megaminería metalífera.
“Córdoba tiene uranio por donde se busque, y si van a seguir removiendo material, esto termina contaminando ríos y sumando fósforo y nitrógeno para las algas del lago San Roque”, expresó Ferrero. “Esta lleno de feldespato y cuarzo por todos lados. Les pedimos que vayan a otro lado, que no arruinen más a Punilla”, dijo.
Nicolás Unsain, biólogo del Conicet y presidente del Club Andino Córdoba, remarcó que la zona está protegida por la ley que creó la Reserva Hídrica Pampa de Achala y por la ley de bosques. “Como está dentro de la reserva hídrica, la ley señala que deben protegerse el suelo y la biodiversidad, y eso no condice con la mina. Además, en esa zona hay bosque nativo sin tocar, que también está protegido por otra ley”, marcó.
Unsain sostuvo que, con esos dos condicionantes, “el proyecto ni siquiera debería haber llegado a la instancia del debate en audiencia pública”. A la vez, cuestionó que el estudio de impacto ambiental presentado por la empresa es de 2005. “No estamos en contra de la minería: el problema es dónde y cómo. En este caso, el dónde es el que torna prohibitivo de entrada al proyecto”, destacó.
Planteo de Minería
Desde la Secretaría de Minería de la Provincia se emitió un comunicado que niega que esta mina tenga alguna relación con la explotación de uranio. “Vincular una mina de feldespato, cuarzo y mica, materias primas para la fabricación de vidrios y cerámica, con la exmina de uranio de Los Gigantes no es correcto. Menos, que la Mina Nácar podría ser receptora de residuos nucleares, cuando la propia provincia de Córdoba ya ha fijado por ley posición al respecto”, señalaron.
Desde Minería se planteó que la Provincia fijó una posición “muy clara” en contra del traslado de los residuos sólidos de la planta de Dioxitek (de Córdoba Capital) a Los Gigantes y que además está acordando con la Nación la remediación de aquella vieja mina.
“No se permitirá depósito alguno de residuos nucleares en Los Gigantes. Sirva esta aclaración como explicación a los temores que pudiera tener la población”, señaló Minería.
Ahora, con audiencia suspendida, el proyecto se desacelera.