La pelea por los choferes despedidos
El justicialismo de la Capital le había pedido a Mestre que reincorporara a los trabajadores, pero el gobernador lo desautorizó. El concejal Pablo Ovejeros admitió que la conducción partidaria en la ciudad de Córdoba sentó posición sin conocimiento del Ce
Política
El gobernador Juan Schiaretti salió a despegarse del comunicado que emitió el lunes pasado el PJ de la Capital, mediante el cual le pidió al intendente Ramón Mestre que reconsiderara la decisión de mantener firmes los despidos de más de 160 choferes, como consecuencia de los nueve días de paro del transporte urbano de la ciudad de Córdoba.
“No fui consultado por el partido. Los que deben decidir, en el marco de la legislación vigente, si hay o no reincorporaciones, son los empresarios y los trabajadores representados por UTA nacional”, explicó el gobernador.
En un breve video que envió a los medios, el mandatario admitió que es una cuestión que no le compete. “El Gobierno provincial no debe emitir opinión al respecto porque es imprudente hacerlo”, concluyó Schiaretti, luego de encabezar ayer por la mañana el acto por el Día de la Bandera en la ciudad de Villa María.
El gobernador salió a desmarcarse de su partido, cuando percibió la oleada de críticas que recibía el comunicado por los despidos.
Schiaretti dijo que se enteró por los medios de comunicación de la postura del peronismo de la ciudad de Córdoba que preside Claudia Martínez, pero que en la práctica conduce su esposa, Alejandra Vigo, pese a no tener un cargo formal.
El concejal capitalino Pablo Ovejeros admitió que fue el PJ Capital el responsable del comunicado, pero deslindó responsabilidades del gobernador.
“Fue una decisión que tomó el peronismo de la Capital, y el gobernador no fue notificado. Se analizó la situación y muchos presidentes de seccionales y dirigentes sindicales que hay en el partido, opinamos que no se puede dejar en la calle a casi 200 trabajadores”, comentó Ovejeros.
El propio edil peronista es de origen sindical. “Consideramos que fue un error una huelga tan prolongada. También creemos que estos choferes deben recibir una sanción por el daño causado, pero nos parece demasiado castigo dejarlos en la calle. Aunque el reclamo fue justo, sin dudas que se cometieron errores y debe haber sanciones, pero, como peronistas, nunca vamos a estar a favor de despidos masivos”, argumentó el concejal capitalino. Cómo se gestó Según varias fuentes consultadas por este diario, el comunicado del PJ Capital se comenzó a gestar en una reunión que se realizó el miércoles pasado.
En ese encuentro, varios presidentes de seccionales, algunos con militancia gremial, solicitaron que se “hiciera algo” en defensa de los choferes despedidos.
Los dirigentes peronistas capitalinos analizaron que esta postura podría “rozar” al Gobierno provincial, por lo cual la decisión fue no informarle al gobernador y hacerlo por cuenta del partido.
En el peronismo admitieron que es “poco probable” que Alejandra Vigo no haya conocido esta decisión de la conducción del PJ Capital, que no preside, pero conduce en los hechos.
Este diario intentó, ayer, comunicarse con la secretaria de Equidad provincial, y casi segura segunda candidata a diputada nacional por Unión por Córdoba, pero no pudo ubicarla.
De todos modos, más allá de que el gobernador haya tomado distancia de la postura del PJ Capital, la mayoría de los funcionarios provinciales con perfil político opinan parecido a su partido: no debería haber despidos masivos. Creen que muchos choferes se plegaron al paro por temor a represalias de parte del núcleo duro de los huelguistas.
En el Centro Cívico varios consideran –por lo bajo– que el intendente Mestre tiene una postura intransigente, porque las encuestas le indican que la gran mayoría de los capitalinos quiere que echen a los choferes que protagonizaron una de las huelgas más prolongadas de la historia de este servicio.
Según la lectura que hacen no pocos funcionarios peronistas, el gremio de la UTA nacional tampoco avalará los despidos masivos.
Pero, por ahora, lo concreto es que el gobernador Schiaretti se despegó de la postura del peronismo de la Capital, el partido en el cual milita desde hace cinco décadas.
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