¿Cuándo dejamos de ver el ombligo de la ciudad?
LA CIUDAD DESARROLLÓ UN DESAPEGO TAL POR EL OMBLIGO DE LA CAPITAL QUE MUCHOS DE SUS HABITANTES SE SIENTEN IGNORADOS.
El Cabildo, la Catedral, la Municipalidad, el Centro Cívico provincial, el Teatro del Libertador, la city y la peatonal. Casi todas las instituciones y símbolos importantes de esta comunidad tienen sede en el Centro, el barrio que cada vez menos cordobeses habitan porque se encarga, con su innumerable oferta de problemas urbanos, de expulsarlos hacia otros barrios e, incluso, hacia ciudades del Gran Córdoba.
¿Quién se anima a vivir en el Centro?, pregunta nuestro informe de Primer plano. La ciudad desarrolló, en las últimas décadas, un desapego tal por el ombligo de la Capital que muchos de sus habitantes y de los comerciantes que trabajan en el sector se sienten desatendidos e ignorados.
El combo de problemas de tránsito y de higiene urbana, más los inconvenientes derivados por la superposición de obras públicas, apuradas en un año electoral, están haciendo la vida muy difícil para los casi 30 mil capitalinos que aún pernoctan en algún departamento o casa (los menos) del área central.
Además, el Centro es la sede de la protesta social. Para hacer visible un reclamo, todos los caminos conducen a General Paz y Colón o a la ex plaza Vélez Sársfield, la esquina del principal shopping del Centro: Patio Olmos.
Es cierto que hay otras dinámicas en la ciudad, que los estudiosos del planeamiento urbano denominan “nuevas centralidades”, fruto de la expansión de servicios y de la descentralización aún incompleta de los órganos de gobierno. Hay un centro en Villa El Libertador, otro en San Vicente, uno más en la Alem y otros en el Cerro de las Rosas y en Villa Belgrano.
No hace falta que todo imite el diagrama radial del transporte, que siempre pasa por el Centro, pero eso no debería ser razón para desatender qué pasa en la zona, hogar de casi 30 mil cordobeses, y segundo hogar de un número por lo menos igual de trabajadores, y sitio de paso de casi 300 mil personas a lo largo de un día hábil.