Maduro exhibe su fuerte vínculo con los militares tras la revuelta
Tras el ataque de uniformados a un cuartel, el régimen venezolano se esfuerza en demostrar la lealtad de las Fuerzas Armadas. Analistas explican por qué es improbable una sublevación, pese a la crisis que atraviesa el país.
CaraCas. En momentos en que la crisis política en Venezuela se descontrola, el papel de la poderosa Fuerza Armada Nacional Bolivariana (FANB) cobra cada vez más importancia. Por eso, el régimen de Nicolás Maduro se apresuró a aclarar que los uniformados que el domingo atacaron un cuartel general eran en su mayoría civiles disfrazados de soldados y comandados por un capitán amotinado. En tanto, la oposición sigue de cerca la actuación de los militares, para ver si su lealtad al Gobierno se está resquebrajando.
Mientras los cuerpos de seguridad aún buscan a los asaltantes del fuerte de Carabobo que huyeron con una imprecisa cantidad de armas, muchos venezolanos se preguntan si este incidente puede anunciar un alzamiento mayor en unas Fuerzas Armadas con largo historial de rebeliones y cuyos soldados están cada vez más atrapados en la crisis del país.
Los analistas dicen que, por ahora, algo así es improbable. Los indicios de descontento crecen porque las fuerzas de seguridad son blanco de avalanchas de piedras y cocteles molotov durante las protestas contra el gobierno. Pero los soldados temen un enjuiciamiento en caso de que llegue al poder un gobierno opositor.
“Se sienten atrapados”, afirma el exgeneral Hebert García Plaza, quien fue ministro de Maduro hasta que se exilió en Washington en 2015. “Hay mucha intranquilidad, pero ellos no pueden provocar un cambio político sin un horizonte claro sobre qué viene después de Maduro”, reflexionó.
Las Fuerzas Armadas han acumulado un poder y un privilegio sin par en las últimas dos décadas. Maduro depende cada vez más de ellas, a medida que su propio Poder Ejecutivo se debilita.
La semana pasada, con el respaldo de generales, procedió con un plan para instaurar una Asamblea con el mandato de reescribir la Constitución. Oponentes políticos y gobiernos extranjeros consideran que se trata de una usurpación ilegítima de poder.
Demostración de fuerza
Varios centenares de militares uniformados y con armamento de guerra se presentaron ayer en la televisión pública, acompañados del ministro de Defensa de Venezuela, Vladimir Padrino, para subrayar la unidad castrense ante el ataque del domingo contra la base militar en el estado Carabobo.
“Llamo a la unión nacional, a rechazar con contundencia, con espíritu patriótico, a rechazar todos estos actos viles, traicioneros, cobardes que están perpetrándose contra la patria de Simón Bolívar”, expresó Padrino.
Aclaró que el ataque en Carabobo fue dirigido por dos militares y “varios delincuentes civiles que portaban prendas militares”.
En Venezuela se registran desde abril manifestaciones a favor y en contra del Gobierno, que ya dejaron 121 muertos, situación que se agudizó desde la instalación de la Constituyente el viernes. A esa crisis se sumó la sublevación del domingo, que dejó tres muertos y ocho detenidos.
atados a la revolución
La oposición está llamando a las Fuerzas Armadas a abandonar su lealtad al Gobierno y presionar a Maduro para que ceda a sus demandas, pero muchos en las Fuerzas Armadas, especialmente los oficiales de alto rango, tienen atada su suerte a la de la revolución. Maduro les dio el control sobre sectores clave de la economía, como la importación de alimentos. Además, recompensa a los soldados con aumentos salariales y bonificaciones que son la envidia de la población civil.
Pese a la lealtad expresada, comenzaron a aparecer algunas rajaduras en el respaldo militar. Al menos 106 miembros de las Fuerzas Armadas fueron encarcelados por cargos de rebelión y traición desde el inicio de las protestas en abril, de acuerdo con listas provistas por un oficial a condición de no ser identificado.
Hubo además deserciones de soldados que se volvieron sensación en las redes sociales. Uno de ellos es Giomar Flores, oficial que en junio dio a conocer un video en el que llamó a las Fuerzas Armadas a defender la Constitución antes de escapar a Colombia.
Pero una rebelión a gran escala enfrenta enormes obstáculos. “Es muy difícil crear masa crítica sin ser descubiertos”, dijo Ivan Briscoe, analista de la organización International Crisis Group. “En una era de comunicaciones, las autoridades pueden ser alertadas del riesgo de desestabilización muy rápidamente”, acotó.
Los analistas coinciden en que, lejos de resolver los problemas, un golpe podría desatar una crisis internacional y dividiría las Fuerzas Armadas, generando niveles de violencia de una guerra civil.
los Venezolanos deben Hacer todos los esfuerzos posibles para reducir tensiones. António Guterres, secretario General de la ONU todo aquel que Haya HecHo llamados a la Violencia, Vamos a solicitar que sea inHabilitado. Diosdado Cabello, constituyente y hombre fuerte del régimen españa no reconoce a la asamblea constituyente ni sus decisiones ilegales y contrarias a la Voluntad del pueblo. Mariano Rajoy, presidente español Hoy, Venezuela no es una democracia y Va camino a una dictadura o a un gobierno de partido único. Heraldo Muñoz, canciller chileno