Instituto volvió a las prácticas con nuevas caras
Ricardo Blanco será el encargado de darle fútbol a Instituto en busca del ascenso. “Yo soy ganador”, dijo al llegar.
Volver a Primera, esa es la cuestión. Con ese primordial objetivo el plantel de Instituto comenzó ayer su pretemporada con ocho refuerzos y a la espera de varios más, que llegarán en los próximos días.
Bajo las órdenes del flamante entrenador Gabriel Gómez, los jugadores trabajaron durante más de dos horas en La Agustina, donde la Gloria se entrenará toda la semana en doble turno. Entre las caras nuevas, estuvo Ricardo Blanco, el talentoso enganche que será el encargado de darle fútbol a Instituto. Con la caradurez y la simpatía que suele mostrar en la cancha, el ex All Boys no dudó al momento de atenderle el llamado a Gastón Defagot días atrás. “Si vos querés ascender, me tenés que contratar a mí”, le dijo el quilmeño al titular albirrojo. “Pero fue un chicaneo nomás. Uno siempre que viene a un club importante, como es Instituto, grande en Córdoba, la meta es ascender. No sirve ser perdedor, yo soy ganador”.
El mediapunta ocupará el lugar que quedó vacante tras la partida de Paulo Rosales y viene de jugar en el fútbol de Kuwait, donde fue campeón en Primera División con el Al Qadsia Sporting. “Kuwait está casi pegado a Dubai, hace un calor tremendo. Llegamos a jugar con 47 grados. Igual fue una linda experiencia que duró cinco meses. En All Boys, las cosas no estaban bien y necesitaba un aire nuevo”, contó Blanco, quien agregó: “El fútbol allá es diferente, te pegan mucho, es más defensivo. No hay como el sudamericano”.
El más bajito de los refuerzos fue dirigido por Gómez en Villa Ramallo y contó que el DT lo hacía jugar de enganche o de media punta por alguna de las bandas: “Con él, hemos jugado con un 433 o con un 3511. Yo me adapto, no tengo problemas. Gabriel sabe dónde puedo hacer la diferencia”. Blanco fue clave para que Germán Lesman “se canse” de marcar goles, tanto en Ramallo como en All Boys, por eso no ve con malos ojos que el delantero se sume a Instituto, aunque las negociaciones seguían con trabas hasta ayer.
Vino para quedarse
Si bien serán al menos unos 14 los refuerzos que Instituto traerá esta temporada, la intención es que el próximo año no haya que salir a armar un plantel totalmente nuevo. Por eso es que Blanco y varios jugadores más llegaron al club con opción de compra.
“Firmé por un año, con opción de compra. Mi pase es de Defensores de Belgrano (VR). Así que trataré de hacer lo mejor posible para poner a Instituto donde se merece, porque es un club muy grande. Ojalá se nos dé lo de salir campeones y poder quedarme”, dijo el nuevo “10” de la Gloria. Su deseo es el de todo Instituto. Porque al centenario todos quieren disfrutarlo en Primera.