Otro policía preso por mal uso de su arma reglamentaria
El oficial se puso a disparar en una calle contra motochoros y los balazos dieron en dos automóviles. No hubo heridos. Horas antes, un cabo había sido apresado por amenazar a comerciantes con dos pistolas.
“Pensé que eran fuegos artificiales que estaban tirando. Pero no, eran disparos. Y esos tiros habían sido hechos por un policía que estaba de traje y que no se quiso identificar luego ante nosotros... Nos podría haber matado. Uno de los impactos atravesó el auto en el que íbamos y no nos pegó de puro milagro”.
Así se expresó ayer una mujer que viajaba en uno de los dos autos que terminaron baleados a manos de un policía que tiraba, en plena calle, contra unos motochoros que acababan de asaltarlo. Otro vehículo, también con una familia adentro, fue alcanzado por otro impacto de bala.
Por ese violento episodio ocurrido el pasado martes a la noche en el Centro de la ciudad de Córdoba, el policía quedó finalmente detenido e imputado por el delito de abuso de arma.
Se trata del oficial principal Nicolás Ríos, de 41 años, quien al momento de los hechos se encontraba de civil. Ríos, quien se desempeña en la Patrulla Ambiental, quedó alojado, por ahora, en la Cárcel de Bouwer, y no volverá a trabajar en el corto plazo, ya que también quedó en situación pasiva por orden del Tribunal de Conducta Policial.
Con su caso, suman dos los efectivos policiales que, en pocas horas, quedaron detenidos e imputados por excederse en el uso del armamento reglamentario.
El anterior caso tiene por protagonista al cabo José Luis Chávez Célis (32), quien, como se informó enlaedicióndeayerde La Voz, fue apresado luego de haber amenazado con dos pistolas (una en cada mano) a un comerciante y a su hijo en una rotisería del barrio José Ignacio Díaz 5ª Sección, de la Capital. Incluso, según testigos, ese cabo (que estaba de civil) habría apuntado contra una patrulla policial que arribó al lugar.
Por fortuna, no hubo que lamentar personas heridas. Junto con el cabo también fue demorada su novia, una agente policial.
Estos últimos casos se agregan a una preocupante serie de episodios en los que vienen quedando involucrados distintos efectivos de la fuerza de seguridad, tanto en la ciudad de Córdoba como en el interior provincial.
Hay mucha preocupación en los altos mandos de la Jefatura de Policía precisamente por esta ola de casos que tienen a los hombres de azul en el ojo de la tormenta. Sin embargo, no hay por ahora comentarios de forma oficial.
Balazos en hora pico
El último episodio ocurrió el martes a la tarde en calle Salta al 400, en cercanías del Hospital de Urgencias, en un momento de mucho tránsito vehicular y peatonal.
Por el lugar iba caminando, de civil, el oficial de policía Ríos. No estaba claro si iba hablando por teléfono o si lo hacía mandando mensajes. Lo concreto es que pasaron dos motochoros, uno de los cuales se lo sustrajo.
Testigos declararían luego que los ladrones no iban armados.
Fue entonces cuando el policía sacó su pistola reglamentaria 9 milímetros y, sin identificarse, comenzó a disparar hacia donde iban los ladrones, en medio de los autos. Los testigos fueron coincidentes: los motochoros nunca le tiraron al policía.
Uno de los disparos del oficial atravesó un auto (desde la luneta hasta el parabrisas) donde iba una pareja y otro, al menos, destrozó una ventanilla de otro coche donde iba una mujer con un chico.
Ríos quedó detenido por abuso de arma por orden del fiscal de Instrucción Guillermo González. El funcionario judicial considera que actuó de forma temeraria y puso en peligro a personas inocentes, siendo lo más grave el hecho de que es un efectivo con muchos años en la fuerza.
Abuso de arma. Laleyprevé para este delito una pena de cárcel que va de 1 a 3 años de prisión.