La Voz del Interior

La elección de Bullrich en Buenos Aires se vivió como un triunfo

El candidato de Cambiemos peleaba por ser el más votado en las primarias bonaerense­s. En el búnker del oficialism­o, el desempeño del exministro de Educación provocó la euforia.

- Juan José Domínguez Correspons­alía

BUENOS AIRES. El gobierno de Mauricio Macri recibió buen apoyo en la provincia de Buenos Aires, donde vota el 36 por ciento del padrón de todo el país. Allí, la lista que encabezó Esteban Bullrich estaba apenas arriba nada menos que de Cristina Kirchner, con el 85 por ciento de las mesas escrutadas.

El resultado podría revertirse esta madrugada a favor de la expresiden­ta, pero no por mucho. Este “empate técnico” fue celebrado como una victoria por el oficialism­o, luego de que casi todas las consultora­s de opinión previeran un resultado desfavorab­le más abultado.

En la Capital Federal, en cambio, la oficialist­a Elisa Carrió directamen­te arrasó: le ganó a las tres listas kirchneris­tas juntas (las que encabezan Daniel Filmus, Guillermo Moreno e Itai Hagman) por 29 puntos y arañó el 50 por ciento de los votos, con el 99 por ciento de las mesas escrutadas.

La líder de la Coalición Cívica y la gobernador­a bonaerense, María Eugenia Vidal, fueron las caras de la victoria de Cambiemos: son las dirigentes con mayor imagen positiva.

Carrió logró un respaldo extraordin­ario: la votó casi la mitad del electorado porteño. Y la mandataria macrista, que en las últimas dos semanas se puso al frente de la campaña en la provincia, logró que la lista de Cambiemos cosechara más o casi la misma cantidad de votos que la de Cristina Kirchner, contra todos los pronóstico­s.

Como en anteriores elecciones, las consultora­s de opinión volvieron a figurar entre las principale­s derrotadas de los comicios.

Si los resultados de ambos distritos en esta elección primaria se confirman en las generales del 22 de octubre, Cambiemos se quedaría con dos senadores por la provincia de Buenos Aires, los macristas Bullrich y Gladys González, y Cristina entraría como senadora por la minoría. Se quedaría afuera del Senado el excan- ciller Jorge Taiana. A menos que los resultados se reviertan a favor de Unidad Ciudadana. Proyección El oficialism­o sí obtendría 14 de las 35 bancas de diputados en juego, contra las 12 que lograría el frente kirchneris­ta Unidad Ciudadana; la alianza 1País, que lidera Sergio Massa, se quedaría con 6; el Frente Justiciali­sta, que postula a Florencio Randazzo para la Cámara Alta obtendría 2, y la izquierda conseguirí­a una, para Nicolás del Caño, que de esta manera volvería a integrar la Cámara Baja después de haber ocupado una banca por Mendoza.

En la ciudad de Buenos Aires, que este año no renueva sus representa­ntes en el Senado, la lista que encabeza Carrió, Vamos Juntos, se quedaría con 8 de las 13 bancas de diputado en juego; el kirchneris­mo, con 3; y el radicalism­o porteño, que se abrió de Cambiemos para llevar de principal candidato al exembajado­r en Washington Martín Lousteau, con 2.

El massismo y la izquierda, en cambio, no ganarían ninguna banca en la Cámara Baja por la Capital, a menos que logren mejorar el desempeño de ayer. Pura fiesta Cambiemos instaló su búnker porteño y bonaerense en el complejo de salones Centro Costa Salguero, donde Macri celebró la victoria de ambos distritos y también en otras 10 provincias: Córdoba, Corrientes, Entre Ríos, Jujuy, La Pampa, Mendoza, Neuquén, San Luis, Santa Cruz y Santa Fe.

De esta manera, Cambiemos se convierte en la coalición no peronista que sale primera en más provincias en 32 años. En 1985 el alfonsinis­mo ganó en 20.

Además, desde 1985, ninguna alianza de partidos de perfil peronista ni radical ganaba en los cinco distritos más poblados: la ciudad y la provincia de Buenos Aires, Córdoba, Santa Fe y Mendoza.

Si los resultados en todo el país se repitieran, Cambiemos tendría una mayor representa­ción en el Congreso: pasaría de 16 a 22 senadores y de 86 a 105 diputados. Pese a este crecimient­o, en ambas cámaras Cambiemos seguiría sin tener mayoría y debería negociar con los bloques peronistas y el resto de los opositores para la sanción de las leyes.

En Costa Salguero el clima fue de alegría desde temprano: las encuestas a boca de urna que había encargado el oficialism­o para la provincia y la ciudad de Buenos Aires coincidier­on con los resultados oficiales que se difundiero­n a partir de las 21.

El Presidente habló 15 minutos antes de las 23, una hora después de que lo hiciera la gobernador­a Vidal, y los precandida­tos de Cambiemos Bullrich y Graciela Ocaña (a diputada nacional). Cambio en marcha “El cambio comenzó, está, no es propiedad de un gobierno, es de todos los argentinos, los argentinos que tenemos derecho a vivir mejor”, dijo el jefe de Estado.

Macri agregó: “Lo que vale en serio no se hace de un día para el otro” y destacó el desempeño electoral de Carrió: “Tiene que ver con un reconocimi­ento al liderazgo de años y a la defensa de los valores de la república”, indicó.

“El peronismo tiene una gran oportunida­d de demostrar que escuchó el pedido de los argentinos”, señaló Macri.

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(TÉLAM) Respaldo. El apoyo de la gobernador­a de Buenos Aires, María Eugenia Vidal, fue clave para el desempeño electoral de los candidatos de Cambiemos.

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