Sanción y polémica
Cristiano Ronaldo y el Real Madrid tienen 10 días para apelar los cinco partidos de suspensión por empujar a un árbitro.
La “calentura” de Cristiano Ronaldo por la segunda amarilla y la expulsión, en el partido por la Supercopa de España frente a Barcelona, y el posterior empujón al árbitro Ricardo de Burgos Bengoetxea derivaron en una sanción de cinco partidos de suspensión para el crack portugués: una fecha por la roja, cuatro por la “palmadita” al referí.
Cristiano y el Madrid tienen 10 días para apelar la sanción, que generó polémica. El Madrid envió las alegaciones correspondientes, intentando que le retirasen la segunda amarilla al portugués. Sin embargo, el juez fundamentó su sanción al considerar, en primer lugar, que el árbitro es la autoridad deportiva “única e inapelable” en el orden técnico para dirigir los partidos, por lo que no es posible revocar una decisión suya. Por esta razón, CR7 se perderá la revancha de mañana frente a Barcelona (el domingo, el Real sacó una ventaja de 3-1) y los cuatro primeros partidos de la Liga. En el torneo regular, Madrid abrirá la temporada el domingo de visitante frente al Deportivo La Coruña. Sus tres partidos siguientes son contra Valencia, el ascendido Levante y la Real Sociedad.
La primera tarjeta vino después de que Ronaldo celebró sacándose la camiseta, tras poner en ventaja a su equipo 2-1. Y dos minutos más tarde, Cristiano pidió penal tras chocar con el zaguero central Samuel Umtiti, de Barcelona. El árbitro le sacó a Cristiano la segunda amarilla por fingir. El portugués alzó los brazos antes de empujarlo por la espalda. “Una vez mostrada la tarjeta roja, dicho jugador me empujó levemente en señal de disconformidad”, reflejó el árbitro en el acta.
Según el fallo de la federación, el empujón violó el artículo 96 del código disciplinario, que establece que “agresiones ligeras al árbitro”, definidas como “halar, empujar o sacudir”, son castigadas con de 4 a 12 partidos. Además, multó a Cristiano con 3.005 euros y al Madrid con 1.400 euros por el empujón. Y con 600 euros al jugador y 350 al club por simular la falta.