Peluqueros solidarios.
Más de 50 alumnos del taller de peluquería del centro socioeducativo Lelikelen realizaron sus prácticas en el vecindario. Convocaron a más de 80 personas. Los estudiantes de cocina regalaron empanadas.
Alumnos del centro Lelikelen cortaron el pelo a vecinos de barrio Yapeyú.
El salón del centro vecinal de barrio Yapeyú, en la primera cuadra de calle Loreto, se convirtió ayer en una gigantesca peluquería con restaurante al paso.
Mientras María Altamirano (24) daba los últimos toques a una cabellera, Macarena (21) terminaba de freír algunas empanadas. La sala era un hervidero de jóvenes deseosos de practicar lo aprendi- do en los talleres de peluquería y de cocina del centro socioeducativo Lelikelen. Desde las 10 y hasta las 16, los vecinos se acercaron a recibir su corte gratuito. Al mediodía ya habían pasado más de 60 personas, la mayoría mujeres y niños. “Es una ayuda para aquellos que no tenemos ni para la cocina”, aseguró Jessica, que llevó a su hijo de 5 años. “No podemos gastar 120 pesos en la peluquería, y aquí lo hacen gratis”, contó.
La iniciativa, que se realiza desde hace cinco años en vecindarios de la ciudad de Córdoba, apunta a que todos ganen: los vecinos y los talleristas de Lelikelen, un centro provincial que ofrece educación formal, laboral y artística a jóvenes judicializados o con derechos vulnerados.
“Los prácticas sirven también para adquirir habilidades sociales y para evitar la estigmatización. El aprendizaje que logran es propio y nadie se lo puede quitar. Ya no es la sociedad que los excluye, sino que ellos pueden decir qué hacer con su propio aprendi-