Una estimulante experiencia tribal
Quince años atrás, Carlinhos Brown, Marisa Monte y Arnaldo Antunes revolucionaron la escena musical del Brasil con el lanzamiento de Tribalistas, primer y único trabajo (hasta ahora) que unió a estos tres grandes e influyentes artistas en un proyecto cautivante. Luego de un enorme hiato musical, el trío inesperadamente volvió al ruedo con la edición de un nuevo disco. Llamado también Tribalistas, esta remozada reunión retoma el espíritu lúdico del encuentro musical pero amplía la mirada del trinomio a un mundo que definitivamente ha cambiado desde comienzos del siglo a hoy. Diáspora, canción que abre el trabajo, conserva indudablemente el ADN sonoro del grupo pero desnuda a través de la poesía el drama global de la inmigración y los refugiados: “¿Dónde está mi hermano sin hermana? Mi hijo sin padre, mi madre sin abuelo…”, se pregunta el coro luego de que la voz taciturnamente grave de Antunes recita fragmentos de textos de Joaquim de Sousândrade y de Castro Alves, y que la melancólica voz de Marisa Monte repita “Where are you?” en un mantra desgarrador. Todo esto sobre los instrumentos africanos (como cajones, afoxés y karkabou) que Brown despliega como base.
Tribalistas 2017 es esto, la reunión de los espíritus curiosos, libres, inocentes y livianos ante las paradojas de un mundo que tiene su contracara hostil. “Uno, dos, tres. Juntos somos muchos, somos uno sólo”, reafirma el cónclave en Um só, canción que enumera las paradojas de la sociedad moderna.
Si hay una mirada sobre el mundo exterior (Trabalibre o Lutar e vencer se unen a las citadas anteriormente), también hay espacio para las cosas que movilizan los cuerpos: Fora da memoria es bella y delicada, Aliança destila romanticismo en su épica procasamiento y Ânima es una parábola sobre la espiritualidad y el sentido de la vida.
Tribalistas condesa la polirritmia de Brown, la sutil voz de Monte y la poética de Antunes en un disco que, a través de la musicalidad festiva del Brasil, cataliza la insoportable levedad del ser.