El transporte y la calle, lugares más inseguros
Evitar tomar colectivos a la noche, enviar mensajes durante un viaje en taxi, avisar al llegar a destino, usar ropa que no llame la atención. La mayoría de las mujeres pone en práctica algún tipo de estrategia para sentirse más segura en la calle.
Así lo constata un relevamiento hecho por la agrupación Mujeres de la Matria Latinoamericana (MuMaLá) sobre violencia contra las mujeres en el espacio público de la ciudad de Córdoba.
El 82 por ciento de las encuestadas dijeron sentirse entre inseguras y muy inseguras cuando caminan solas. El principal factor son los lugares poco transitados o descampados, seguido por los sitios con escasa iluminación. A la noche, la sensación se incrementa. “El temor o la inseguridad que sentimos las mujeres en el espacio público son muy diferentes a los que experimentan los hombres. Mientras ellos temen por su integridad física, las mujeres, además, tememos por nuestra integridad sexual”, advierten desde MuMaLá.
Sobre el acoso sexual callejero, el 94 por ciento dijo haberlo sufrido. La forma más mencionada son bocinazos, silbidos, ruidos de besos y comentarios sobre la apariencia (94 por ciento). También tienen muy alta incidencia las frases sexistas
(70 por ciento), los insultos y los gestos vulgares (67 por ciento), y los comentarios sexualmente explícitos (63 por ciento). El 52 por ciento dijo haber sido seguida en la calle y el 16 por ciento sufrió ataques físicos.
El relevamiento indagó sobre lo que ocurre en el transporte público. El 41 por ciento de las mujeres dijo haber sufrido algún tipo de acoso mientras estaba en la parada del colectivo. El 6 por ciento experimentó violencia física, frente al 35 por ciento que fue acosada verbalmente. En los colectivos predomina el acoso físico: lo sufrió el
32 por ciento de las encuestadas. Otro dato que surge es que el uso del colectivo cae durante la noche, momento en que aumenta el uso del taxi. La mayoría dijo usar este servicio por razones de seguridad.
El informe le pone números a un hábito muy extendido entre las mujeres: mantenerse comunicada con alguien durante el viaje o avisar al llegar a destino. El 87 por ciento lo hace siempre o a veces. Y el 65 por ciento identifica la patente con la misma frecuencia. En cuanto al acoso dentro de taxis y de remises, el
14 por ciento lo padeció.