“El primer derecho es a la vida”
–¿Votaría a favor de la paridad de género en las listas legislativas?
–No. No hablo de “paridad de género”, ya que el concepto de género es producto de una postura ideológica, no científica, hoy muy cuestionada. El cupo femenino fue pensado para evitar los abusos que se producían en algunos partidos en los que las mujeres no eran tenidas en cuenta. Actualmente, una ampliación del cupo femenino es, para mí, una falta de respeto a las mujeres, que hoy no necesitamos de una discriminación inversa para participar en listas a cargos electivos. La sobreactuación en estos temas ha llevado a que en la Unicameral de Córdoba las mujeres no puedan reemplazar a los hombres.
–¿Está a favor de que se extiendan las licencias por paternidad o por maternidad?
–Sí. Respecto a la licencia por paternidad, los dos días corridos que fija la ley de contrato de trabajo son irrisorios. En lo público de la provincia de Córdoba estamos un poco mejor (ocho días), pero se debería llevar a 15 días hábiles en todos los ámbitos. La licencia por maternidad debería ser de, al menos, seis meses, ya que todos los informes sobre el tema destacan la importancia del vínculo entre la madre y el recién nacido, y la importancia de facilitar la lactancia.
–¿Votaría a favor de un proyecto que legalice el aborto?
–Votaré en contra de cualquier proyecto que legalice el aborto. El primer derecho humano es el derecho a la vida, constituyendo el fundamento y el soporte de todos los demás. Incorporar el aborto como una práctica social no es un avance, sino un retroceso antropológico; se dirige contra la vida en su etapa inicial, pero ya objetivamente definida. El aborto, cualquiera sean las condiciones de su realización, no es inocuo para la mujer que se lo practica. Consideramos que la legislación debe disponer los medios para una efectiva asistencia a la madre gestante y al niño concebido, de manera que esté garantizada la salud de ambos y se atienda a los problemas que puedan afligirlos.