Fondo del Conurbano: la Nación quiere una solución política
Lo aseguró el ministro del Interior, Rogelio Frigerio. “Hay que discutir todo”, propuso. Es la misma posición que sostiene Schiaretti.
En sintonía con lo que viene pidiendo el gobernador Juan Schiaretti, el ministro del Interior, Rogelio Frigerio, sostuvo que el conflicto por el Fondo del Conurbano Bonaerense debe tener una “solución política”.
“Desde mi punto de vista, un conflicto de raigambre política debe tener una solución política”, afirmó a este diario el influyente funcionario macrista.
El año pasado, la gobernadora bonaerense, la macrista María Eugenia Vidal, presentó una demanda ante la Corte Suprema de Justicia para que le restituyeran a su gestión el Fondo del Conurbano.
Este Fondo –conformado por el 10 por ciento de la recaudación del Impuesto a las Ganancias, que este año serán unos 53 mil millones de pesos– se creó en el 1992.
Pero a partir de 1996, al excedente se lo reparten el resto de las provincias, cuando se le puso a Buenos Aires un techo de 650 millones de pesos, monto que nunca se actualizó.
En este sentido, el titular de la cartera política nacional manifestó que los propios gobernadores peronistas consideran que el Fon- do debe volver a Buenos Aires.
“El reclamo de Vidal es justo. Después de muchos años, hay una gobernadora con coraje que defiende los intereses de los bonaerenses. Algo que no hicieron los anteriores mandatarios”, argumentó Frigerio.
Según la visión del ministro del Interior, más allá de que la Corte Suprema deberá resolver esta cuestión, el conflicto no debe solucionarse en Tribunales.
“No tengo dudas de que debemos sentarnos a negociar el Gobierno nacional y las provincias para llegar a un consenso. En este conflicto se discute el reparto de recursos, lo que es una cuestión política”, agregó el ministro Frigerio, quien el jueves pasado estuvo en Córdoba para respaldar a los candidatos de Cambiemos.
Propuesta
Aunque el funcionario macrista dice no haber hablado del tema con el gobernador, sus definiciones sobre este diferendo coinciden con la postura de Schiaretti.
Días pasados, antes de que el Gobierno provincial presentara un escrito ante la Corte Suprema, Schiaretti propuso que la demanda de Buenos Aires no tenga una resolución judicial.
“El Congreso nacional sería el ámbito ideal para discutir un nuevo reparto del Fondo del Conurbano. Allí están representadas todas las provincias y también el poder central. En la mesa de negociación se deberá poner todo: los recursos de este Fondo, pero también los subsidios que Buenos Aires viene recibiendo en los últimos años”, manifestó el gobernador.
Metido de lleno en la campaña, Schiaretti también cuestionó la decisión del presidente Mauricio Macri de respaldar de manera pública el reclamo de la gobernadora bonaerense.
“La gobernadora Vidal pertenece al espacio político que gobierna el país, pero es injusto que el Presidente avale sacarles recursos a las provincias para dárselos a un distrito que recibe cuantiosos subsidios del Gobierno nacional”, argumentó en su momento el mandatario provincial.
También en el escrito que presentó ante el máximo tribunal de Justicia, Córdoba cuestionó la posición del Gobierno nacional, que sostuvo que los recursos que se devuelvan a Buenos Aires deberían salir de lo que hoy reciben el resto de las provincias.
“Llama la a atención que el Gobierno nacional tenga esa postura sobre el Fondo del Conurbano y no diga nada sobre los recursos que Buenos Aires recibe de subsidios nacionales”, señaló el escrito que presentó el fiscal de Estado, Jorge Córdoba, con aportes del ministro de Finanzas, Osvaldo Giordano, y el asesoramiento del estudio jurídico porteño que dirige el abogado Alberto García Lema.
En este contexto, tanto la Casa Rosada como los gobernadores aguardan la resolución de la Corte Suprema.
Todos esperan que el máximo tribunal se expida a favor del reclamo de la gobernadora bonaerense, pero que la solución del reparto de los recursos se resuelva en la discusión de una nueva ley que se discuta en el Congreso.
En este caso, la solución sería “política”, como reclamó Schiaretti y como avaló Frigerio.