El estacionamiento, entre las mayores necesidades en Güemes y Nueva Córdoba
El dato surge de un relevamiento a comerciantes realizado por la UCC. Hay apoyo hacia los planes de mejora de la zona. El 66 por ciento está insatisfecho por los servicios que se brindan en esos dos barrios.
El problema del estacionamiento, junto con la mejora del tránsito vehicular y peatonal, sumado a cuestiones de seguridad, son las necesidades que más se reclaman en los barrios Nueva Córdoba y Güemes.
Así surge de una investigación realizada por la cátedra y alumnos del Seminario de Investigación de Mercados de la Facultad de Ciencias Económicas y Administración de la Universidad Católica de Córdoba (UCC). Se entrevistó a encargados de comercios de esos dos barrios entre el 16 y 24 de septiembre pasado, tomando como válidos 310 casos.
De esos comerciantes, la mayoría tiene estudios secundarios, terciarios o universitarios completos.
El trabajo remarca que los dos barrios están en medio de un proceso de crecimiento y transformación que las plantea “como una de Fue realizada por el Seminario de Investigación de Mercados. las estrellas del desarrollo comercial de la Capital”.
Entre otros puntos, se consultó cuáles son las necesidades de mejora. La investigación identifica dos grupos: uno más satisfecho con los servicios en la zona (el 34 por ciento de los encuestados) y otro más insatisfecho (el 66 por ciento).
Este último grupo está “totalmente de acuerdo” con que es necesario mejora el estacionamiento, el tránsito (peatonal y vehicular), el control del tránsito y los servicios de seguridad. En tanto, se mostró “parcialmente de acuerdo” con que es necesario mejorar el transporte público, la recolección de residuos, el barrido de calles y la iluminación en la zona.
Los que están más satisfechos se muestran “parcialmente de acuerdo” con mejorar el estacionamiento, el tránsito y la seguridad. Y “parcialmente en desacuerdo” con la necesidad de que mejore el transporte, el control del tránsito, la recolección, el barrido y la iluminación.
Los investigadores también indagaron sobre las políticas públicas, planes y procedimientos que afectan a la zona.
Sobre los planes de mejora, el 67 por ciento se mostró de acuerdo, de manera total o parcial. En el caso de las políticas de promoción cultural y artística, el índice trepó al 69 por ciento. Acerca de la difusión y promoción de la zona, están de acuerdo el 63 por ciento.
Foto de los comercios
La investigación detalla el perfil de los comercios en Nueva Córdoba y Güemes. Por ejemplo, muestra que el 67 por ciento no tiene empleados estables aunque el 91,4 por ciento dice que tiene trabajadores “temporales”. “Eso habla de precarización laboral”, advierte el equipo que hizo el estudio.
También refleja que el 84 por ciento de los comercios está en un local alquilado y el 59 por ciento es unipersonal, “lo que muestra cierta debilidad”.
El 45 por ciento son monotributistas y el 49,5 por ciento son responsables inscriptos, mientras que el resto no estaría registrado. El 73,6 por ciento se inició con capital propio y el 15,5 por ciento con el de un tercero. El financiamiento no bancario es del 7,3 por ciento y el bancario del 3,6.
En tanto, el 55,4 por ciento de los comercios tienen menos de cinco años. “Son fruto de la explosión comercial en los últimos siete años”, afirman los investigadores.
Para entender de dónde proviene la demanda de la zona, el equipo se remite a una investigación de 2016 que arrojó que de cada 10 visitantes, cuatro son de otros barrios, dos de un barrio a menos de 10 cuadras, uno de otras provincias y uno del resto de la provincia de Córdoba.
Al final, el trabajo de la UCC recomienda que los comerciantes se vinculen con los organismos públicos, y que se integren con los planes de mejora del sector, entre otras cuestiones. metas que se le plantean.
A pesar de ello, o quizás por ello mismo, ha desarrollado una importante relación con sus grupos de interés, aunque su estatus jerárquico disminuya su participación en gabinetes municipales que deciden aspectos centrales que influyan en las políticas turísticas locales.
Asimismo, su participación con pares e instancias provinciales y nacionales se ve disminuida por los escasos recursos presupuestarios y jerárquicos que dispone.
Es importante que puedan incorporarse los “turistas” –no residentes que pernoctan en la ciudad–, los “excursionistas” –no pernoctan en la ciudad– y “visitantes” –residentes de otros barrios y ciudades vecinas o turistas con base en ellas–, sin los cuales las zonas estudiadas no son sostenibles ni desarrollables como zona turística.
Las recomendaciones de la investigación requieren de un plan integral –con la participación de una Secretaría o Subsecretaría de Turismo– que capitalice para la actividad turística los planes de infraestructura, culturales y servicios de Nueva Córdoba y Güemes, que cuentan con aceptación e impulso.