Reformas y consensos necesarios
Los grandes trazos de la convocatoria multisectorial realizada por el presidente Mauricio Macri no pueden ser discutidos. Por el contrario, forman parte de los diagnósticos y de los objetivos de gran parte de la sociedad para dejar atrás años de estancamiento.
El país necesita modernizar sus instituciones y remover los obstáculos que le impiden alcanzar un grado de desarrollo acorde con sus antecedentes y potencialidades. Es imprescindible que los distintos niveles de gobierno asuman la responsabilidad fiscal de sus actos. Los egresos no pueden superar los ingresos a nivel de la administración estatal, salvo que se decida transitar los caminos de la inflación y el endeudamiento permanentes.
El control de la inflación exige asumir con capacidad autocrítica cada gasto en cada jurisdicción, lo que debiera traducirse en una menor carga impositiva.
El crecimiento de la economía tiene que generar los empleos de calidad que demanda la formación que exhiben los recursos humanos, con capacidades similares o superiores a las de los principales centros de desarrollo.
La eficiencia en el funcionamiento de las instituciones de la república tendrá que ser una tarea impostergable para los tres poderes del Estado. Macri mencionó como las mayores distorsiones la superpoblación de empleados en el Congreso Nacional, la inactividad durante 45 días al año del Poder Judicial y la atomización de la representación sindical. La modernización del Estado es el primer paso, con el objetivo de reducir los costos de tramitación y gestión.
Los lineamientos de la reforma impositiva serán enunciados mañana, lo que demandará una intensa negociación con los gobernadores, y de estos con los municipios.
El aliento a la inversión privada será expuesto por Macri el próximo jueves ante la Bolsa de Comercio; y la semana próxima, ante los centros financieros de Estados Unidos.
Los objetivos generales de las reformas son plausibles y deberán ser acompañados en el debate con la sana intención de mejorar la calidad de vida.
El Gobierno y los representantes sectoriales tendrán que estar dispuestos a hallar consensos mínimos para sentar las bases de un desarrollo sustentable.
La administración Macri debe ser consciente de que las reformas no pueden afectar a los sectores de ingresos fijos, como es el cambio sugerido en la movilidad jubilatoria. Las mejoras que percibieron en los últimos años no compensan los mínimos haberes absolutos que cobra la gran mayoría de los adultos mayores.
La Argentina está ante la oportunidad de alcanzar acuerdos mínimos sobre las reformas que anhela la sociedad. Todos los actores están obligados a tener una mente abierta y a resignar privilegios.