“Pensé que llegaba hasta ahí, pero ahora vivo para contarlo”
En medio de la proliferación de noticias sobre la inseguridad en Córdoba, ayer hubo una novedad más que positiva.
Franco Zanabria, el joven de 19 años que fue baleado en el estómago el lunes de la semana pasada en medio de un violento asalto en una carnicería de Villa El Libertador, ayer se mostró por primera vez en los medios y, si bien permanece internado, dejó claro que su evolución es más que satisfactoria.
“Ya sabían dónde estaba la plata, pero no había nada allí. Sale mi patrón por un pasillo y agarra a uno en la calle. Ahí salgo yo y le empiezo a pegar con un cajón de verdura. Le pegué tres veces y en la tercera siento el balazo. No pensé nada. El balazo fue en la panza y siempre estuve consciente. Sentí que llegaba hasta ahí, pero ahora vivo para contarlo”, recordó el joven.
Franco grabó un video con un celular en el que agradeció todo el apoyo que él y su familia tuvieron durante estos largos días.
La escena generó conmoción en Córdoba, ya que el último acto del asalto quedó filmado. Con Franco ya baleado, el dueño de la carnicería intentó atrapar a dos de los ladrones, cuya moto no arrancaba, momento en que uno de los delincuentes le disparó dos veces desde muy corta distancia.
El caso también generó un encontronazo entre la Policía y el fiscal que investiga, Tomás Casas, ya que, a las pocas horas de ocurrido el episodio delictivo, desde la fuerza se anunció que había un detenido, algo que el funcionario judicial negó de manera tajante a través de un comunicado de prensa.
Ayer, desde la fiscalía se confirmó que recién el jueves se libraron dos órdenes de captura contra los sospechosos que quedaron filmados, pero, al momento de allanar los domicilios en los que se presumía que podían estar, no fueron ubicados.
Tampoco están identificados los otros dos delincuentes que formaban parte de la banda que aquel lunes a media mañana ingresó en la carnicería de avenida de Mayo.