Dicen que lo hacen por el paciente y el Gobierno asegura que no hace falta
“Si hoy cuando cruzo con el carrito –con material para esterilizar en el Hospital de Niños– tengo un accidente, la ART no me lo cubre. Estoy fuera de mi lugar de trabajo y haciendo algo que no debo. Pero uno lo hace por el paciente, uno se pone en ese lugar, en la cama, y a esa persona no le podemos decir que no la vamos a curar porque no tenemos el material esterilizado”, sostuvo Beira.
Esta especie de club del trueque es naturalizada por parte de los trabajadores de esterilización; como también se naturaliza que por años se tenga roto un aparato.
“Lo que hago, lo hago para tener material. Porque, si no, tendría que estar diciendo ‘disculpá, pero hoy no te puedo dar una gasita’ y mandar al paciente a quejarse a otro lado”, apuntó el trabajador del Rawson.
La referencia al paciente es constante, como también al cansancio producto de estar todo el
El pasado 25 de octubre, la jefa de Enfermería, Rosa Rodríguez, envió a Esterilización un requerimiento de gasas –al menos 50 unidades más de las 100 diarias que reciben– para cumplir con las necesidades de sus pacientes.
Se le respondió que, por falta de personal, y con conocimiento de la Dirección, no tenían posibilidad de satisfacer la demanda y de brindar los materiales de curación. tiempo “tapando baches” o “atando las cosas con alambre”.
“No me puedo sentar a esperar a ver cómo se va a esterilizar porque tengo el autoclave roto, o cuando voy a tener material poroso procesado o cintas. Entonces uno tiene que tomar decisiones, y una de esas jugadas es cruzarse con los vecinos. Yo pienso que uno tiene que dar excelencia en esterilización, pero, si no tenés los elementos, el personal y la maquinaria, no se puede. Terminás agotado”, enfatizó.
Es cierta la fatiga en los ojos de los trabajadores mientras cuentan sobre materiales intercambiados, maquinaria rota y jornadas a todo vapor por la falta de personal.
Pero también son ciertas y reales las pilas de materiales acumulados en el depósito que la Provincia tiene para Salud.
Depósito abarrotado
“Con la cobertura y el stockeo que tenemos, esto no puede pasar, pero puede haber errores, usos y costumbres que hay que ir modificando. Pueden ocurrir situaciones, pero no deberían, porque está todo brindado para que no suceda. Estamos haciendo cambios, y la resistencia a ellos es algo natural”, intentó interpretar el ministro de Salud, Francisco Fortuna.
Fortuna también explicó que, como respuesta ágil ante una eventual falta de insumos, el director del hospital puede comprar lo que le haga falta, ya que tiene esa autorización de caja chica, sin perjuicio de que la compra, depósito y distribución estén centralizados y se renueve mensualmente el stock general tras los pedidos mensuales de cada centro de salud, un sistema que, según el ministro, garantiza la eficiencia en la distribución y mejora los costos.
El depósito lleno de insumos en las afueras de Córdoba –que la Provincia tiene para abastecer a sus 42 hospitales– se ofrece como prueba contra los relatos de trueque en los hospitales. O su relativización a una rara excepción.