Quedan expuestos años de bajo presupuesto
La búsqueda de un submarino argentino desaparecido en el Atlántico Sur desde hace más de una semana dejó en evidencia los escasos recursos y la falta de capacitación que tienen las Fuerzas Armadas desde que acabó la dictadura militar. El presupuesto militar no ha sido una prioridad, por lo que un incidente como la desaparición del ARA San Juan era una posibilidad latente, dijeron analistas militares y políticos.
“Las violaciones de los derechos humanos perpetradas por la dictadura rompieron el vínculo entre sociedad y Fuerzas Armadas”, dijo Andrei Serbin Pont, director de investigación de Cries en Buenos Aires.
“A la mayoría de los argentinos no les preocupan las Fuerzas Armadas, por lo tanto, los políticos no están particularmente interesados en mantener ningún tipo de política militar o de defensa”, dijo.
Desde la derrota en la Guerra de las Malvinas, el gasto militar cayó de 2,16 por ciento del producto interno bruto (PIB) a 0,87 por ciento en 2011, según el Banco Mundial.
Si bien subió a 0,96 por ciento del PIB el año pasado, el gasto es proporcionalmente menor al de Brasil y Chile: 1,3 por ciento y 1,9 por ciento, respectivamente.
La flota submarina de Argentina ha estado entre las áreas militares más afectadas por la falta de fondos. En 2014, la flota estuvo sumergida sólo 19 horas, frente a los 190 días necesarios “para cumplir con las necesidades operativas y de capacitación”, según publicó Jane’s Sentinel en 2016.
“El hecho de que hubiese tan poco uso de los submarinos era una indicación de que claramente era un problema que se estaba fraguando”, dijo Evan Ellis, profesor de Estudios Estratégicos del War College de Estados Unidos.
“Las condiciones en que trabajan ellos son prácticamente imposibles. Estoy hablando de todas las Fuerzas Armadas”, amplió Elisa Carrió.
Pero desde que asumió el cargo en diciembre de 2015, Macri no mejoró en forma notoria el presupuesto militar. El de 2018 prevé una suba de 14 por ciento para Defensa, menos que la inflación proyectada: 15,7 por ciento.
En marzo, el entonces ministro de Defensa, Julio Martínez, dijo que Argentina carecía de dinero para reemplazar aviones.