La “transa” narco, otra vez en el banquillo
En Río Tercero, dos hermanos, uno de ellos exfutbolista, son juzgados por vender drogas al menudeo. La causa describe cómo operan los “deliveries” en los centros urbanos de la provincia.
En el particular código que manejan aquellos que descienden al submundo del narcotráfico, “transa” es aquel que vende drogas al menudeo. Por lo general, son ellos los que despliegan ardides de todo tipo para evitar ser detectados por los investigadores. Hombres y mujeres camuflados en pantallas que nada dicen sobre lo que realmente son.
Desde el jueves último, los hermanos Leyba comenzaron a ser juzgados en Río Tercero, con la imputación de comercialización de estupefacientes agravada.
El proceso, a cargo del juez Marcelo Ramognino, prevé una pena de seis a 20 años de prisión para los sospechosos, si es que terminan por ser hallados culpables.
El expediente que tiene a Emiliano José Leyba (36) y Franco Exequiel Leyba (33) en la mira describe a través de diferentes testimonios y peritajes cómo se realiza la venta de drogas al menudeo en esa parte de la provincia.
El jueves, cuando comenzó el juicio, ambos se abstuvieron de declarar. En la consulta respecto a los datos personales, Franco, quien era jugador de fútbol dentro de la Liga Regional, informó que era adicto a la cocaína.
Ambos vivían, hasta que fueron detenidos, en barrios modestos de Río Tercero, aunque en la investigación se les achaca cierta ostenta- ción en sus estilos de vida.
En la primera audiencia, tres testigos confirmaron que les compraban cocaína a los imputados, a razón de 300 a 500 pesos cada pequeño envoltorio.
Uno, un farmacéutico, y el otro par, comerciante, quienes se reconocieron como consumidores. Declararon que el contacto se hacía por teléfono y luego se encontraban en la calle, en un bar céntrico a plena luz del día o en la casa de los sospechosos.
En el juicio se deberá acreditar si el modo de vida que llevaban estos sospechosos tiene relación con las pruebas de la causa.
Emiliano aseguró que vive del ingreso de trasladar hacia el sur del país a gente que habitualmente concurre a cazar, en forma deportiva. Su hermano Franco manifestó que es vendedor de ropa en forma particular, a sus amigos y conocidos.
Los indicios apuntan a que ellos habrían oficiado de delivery sin la intervención de terceros, para acercar las sustancias ilegales a domicilios particulares o fiestas.
La persecución
Los primeros investigadores comenzaron a perseguir a los hermanos Leyba hace más de siete años, allá por los primeros meses de 2010. Pero recién en marzo de este año fueron detenidos.
Fue clave el rol del fiscal de Instrucción del Fuero Provincial de Narcotráfico (narcomenudeo), Luis Pizarro, quien ordenó numerosas medidas para cercar a los sospechosos.
Las pruebas lucen voluminosas, según confió un policía que participó de la investigación.
Sin embargo, en el juicio deberá acreditarse si la droga secuestrada en poder de los sospechados tenía o no como fin venderla.
En los allanamientos por esta causa, se incautó poca cantidad de estupefacientes. Al menos, en lo que respecta a los procedimientos en la zona en el último tiempo, todo indica que la forma de comercialización se habría modificado.
Así, se podría presumir, de acuerdo a lo que la misma jurisprudencia de esta región indica , que los delincuentes ya no almacenarían grandes volúmenes sino pequeñas dosis, probablemente Franco disputó la Liga Regional con Independiente. Uno de los imputados, Franco Leyba, era un reconocido jugador de fútbol del club Independiente, de Río Tercero, que disputa la Liga Regional.