Polémica adenda por el ex Batallón 141
El oficialismo confía en imponer su mayoría en el Concejo y redireccionar los fondos de Corporación América a Bajo Grande. La oposición adelantó su rechazo. Critican la demora en las obras y el cálculo del ajuste.
Pese a las críticas de la oposición y de diversas asociaciones ambientalistas, todo indica que el Concejo Deliberante de la ciudad de Córdoba aprobará hoy la adenda por el ex Batallón 141 y así redireccionará los fondos de Corporación América a obras en Bajo Grande.
La sesión especial de hoy en el Concejo Deliberante promete ser bien intensa. Entre otros temas, los ediles cordobeses debatirán la adenda firmada entre el Ejecutivo municipal y la Corporación América, que habilita el redireccionamiento de fondos que la empresa debe aportar para compensar el cambio del uso de suelo en los predios del ex Batallón 141, donde se construirá un megacomplejo de viviendas y espacios comerciales.
Inicialmente, el grupo propiedad del empresario Eduardo Eurnekian debía construir una planta de tratamiento de líquidos cloacales en la zona este de la ciudad, para servir a los barrios del sur.
En el convenio firmado en 2013, ese proyecto tenía un costo de 96 millones de pesos. Ahora, los fondos cambian de destino, e irán a parar a una serie de obras que permitirán repotenciar la planta de Bajo Grande, con un costo actualizado de 330 millones de pesos, según lo informado por el municipio.
“Lo importante de esta adenda es que los barrios que iban a estar atendidos por la planta Este, van a estar cubiertos por la repotenciación de Bajo Grande, incluidas las obras que hará la Provincia y la Nación”, aseguró en diálogo con La Voz el concejal oficialista Juan Balastegui, presidente de la Comisión de Desarrollo Urbano, que ayer dio dictamen al proyecto enviado por el Ejecutivo.
Según Balastegui, en realidad, las futuras obras dirigidas a Bajo Grande “no tienen un presupuesto definitivo”. “Cuando esté listo el proyecto ejecutivo, a comienzos de 2018, se volverá a actualizar el monto que debe aportar la empresa, que puede ser superior a los 330 millones informados”, dijo.
Por su parte, desde el espacio de la oposición adelantaron ayer su voto en contra de la adenda, y criticaron en duros términos al convenio firmado por el municipio capitalino. “Este convenio tiene un problema, un pecado original. La contraprestación que pone la empresa es irrisoria. Esos 96 millones de pesos históricos, aún actualizados a 330 millones, representan apenas un dos por ciento de los 900 millones de dólares que ganará la empresa con el cambio de uso de suelo en esas tierras”, estimó Esteban Dómina, de Unión por Córdoba (UPC).
“Ya que se actualiza el convenio, estamos perdiendo una hermosa oportunidad para mejorar las condiciones en favor de la ciudad”, lamentó Dómina.
Desde el bloque ADN, el concejal David Urreta sostuvo que la adenda tiene como “único fin” reducir el monto de la obra que debe realizar el grupo Eurnekian. “Este es un nuevo atropello institucional del intendente Ramón Mestre, que pretende que los concejales aprobemos una adenda sin inversión y sin planos”, fustigó. También criticó que el nuevo convenio está firmado con una empresa con una denominación distinta, y hasta un Cuit diferente.
El proyecto oficial también cosechó críticas vecinales. Sebastián Viqueira, de la Asamblea de Vecinos Autoconvocados de la Zona Sur, dijo que “se perdió mucho tiempo en estos últimos cuatro años porque la Municipalidad no presentó los planos de las obras previstas. En su momento, dijimos que esa planta no se iba hacer nunca, y esto lo confirma”, dijo.
CUANDO EL PROYECTO ESTÉ LISTO, SE VOLVERÁ A ACTUALIZAR EL MONTO DE LA OBRA. Juan Balastegui, concejal de Juntos por Córdoba
LA CONTRAPRESTACIÓN ES IRRISORIA: APENAS EL 2% DE TODO LO QUE GANARÁ LA EMPRESA. Esteban Dómina, concejal de Unión por Córdoba