Cristina debuta con el debate del Presupuesto
La expresidenta regresa al Senado cuando el cuerpo se apresta a aprobar la “ley de leyes”. El Gobierno no espera sorpresas, pero hay expectativa por la discusión entre peronistas.
Tras lo que fue una semana y media de intenso y agitado debate en la Cámara de Diputados, donde se hizo ley la reforma previsional y se le dio media sanción al Presupuesto 2018 y a la reforma tributaria, ahora le llega el turno al Senado.
Hoy, los senadores terminarán de discutir en comisión los proyectos para pasar mañana al recinto, donde existe expectativa por ver en acción a Cristina Fernández.
La dos veces presidenta vuelve por cuarta vez a la Cámara Alta, tras obtener la banca por la minoría de la provincia de Buenos Aires (fue derrotada por Esteban Bullrich, de Cambiemos).
El Gobierno nacional no espera sorpresas y descuenta que los últimos proyectos del año legislativo sean aprobados, en un contexto en el que tampoco se aguardan grandes manifestaciones callejeras de la oposición, como las ocurridas cuando la discusión pasaba por Diputados.
El interbloque Cambiemos, que reúne a 11 radicales y el resto se reparte entre el PRO y bloques provinciales aliados, suma 25 integrantes. Igual número reúne el Bloque Justicialista, que lidera Miguel Angel Pichetto, y en el que se ha encolumnado la mayoría de los senadores cuyos gobernadores, aun siendo peronistas, procuran mantener acuerdos de gobernabilidad con el Poder Ejecutivo.
De hecho, las negociaciones entre la Casa Rosada y los manda- tarios provinciales hicieron avanzar el proyecto de Consenso y Responsabilidad Fiscal y se volvieron claves para la aprobación de las reformas previsional y tributaria.
Al bloque del kirchnerismo lo preside el senador Marcelo Fuentes, aunque, está claro, el liderazgo indiscutido lo encarna Cristina. El bloque se completa con seis mujeres más.
La expresidenta transcurre días agobiantes en el terreno judicial. La semana pasada, la Sala II de la Cámara Federal de Apelaciones confirmó las prisiones preventivas en su contra, dictada por el juez federal Claudio Bonadio en el caso que se investiga el presunto intento por encubrir a los ciudadanos iraníes sospechados de perpetrar el atentado contra la Amia.
La mala noticia para Cristina Fernández, que está en libertad amparada por los fueros legislativos, estuvo acompañada por otra no tan mala: se rechazó la acusación de Bonadio por “traición a la Patria”, imputación que para los camaristas sólo podría aplicarse a un país en guerra.
Aunque se descuenta la aprobación de parte del Senado de los pro- Cristina armó un bloque por fuera del justicialismo.
Reforma Tributaria, prórroga del impuesto al cheque y Presupuesto 2018 marcan el horizonte en el Senado. El interbloque Cambiemos, con el apoyo del Bloque Justicialista, tiene el camino despejado para hacer ley esos proyectos. yectos del oficialismo, la expectativa se centra en la dinámica que podría alcanzar la discusión entre los grupos peronistas separados.
Se auguran imputaciones cruzadas severas. “No vamos a compartir el bloque con alguien que cree que hay que dinamitar todo porque sí; ese no es el espíritu que debe tener el peronismo en esta etapa”, dijo Pichetto cuando anunció la formación del Bloque Justicialista, “libre” de kirchnerismo.
“Confunden gobernabilidad con cogobernar; a nosotros nos votaron para ser opositores”, replicó el kirchnerista neuquino Marcelo Fuentes. Ese será el tono con el que el bloque K confrontará con sus pares conducidos por Pichetto.