Algo más cerca de la realidad que del mito
El Gobierno nacional en octubre decidió pagar un bono estímulo de 5.200 pesos a todos los empleados de la administración pública nacional que no hubieran faltado nunca a su trabajo en los últimos cuatro meses y sólo lo cobraron tres de cada 10 de una plantilla de más de 110 mil empleados. Los demás tenían faltas.
¿Es esa la realidad en todas las jurisdicciones del Estado? ¿Es verdad o es mito la idea de que los empleados públicos faltan más que los del sector privado? ¿Cómo se controla en Córdoba? Comenzamos esta nota con esas preguntas y sin saber si en la Municipalidad capitalina y en la administración provincial existían siquiera indicadores de ausentismo.
Las respuestas están publicadas en la página 6 de esta edición: las tasas de ausentismo son más altas en el sector público que en el sector privado –en el municipio llegan a duplicarlas– pero tanto la Provincia como la administración municipal cuentan hoy con meca- nismos de control que hace apenas cinco años eran inexistentes. La inmensa mayoría de las dependencias están equipadas con sistemas de control biométrico, que impiden la existencia de situaciones como las que se detectaron en estos días en la Cámara de Diputados, donde se contaron más de 200 “ñoquis”. En Córdoba, al menos a la hora de entrar y de salir, los
EN PROMEDIO, LOS AGENTES PÚBLICOS FALTAN MÁS Y TAMBIÉN COBRAN MÁS QUE LOS EMPLEADOS DEL SECTOR PRIVADO.
empleados públicos concurren.
La productividad de esos puestos de trabajo, la igualdad de oportunidades a la hora de acceder a empleos con permanencia garantizada y la distribución de esos trabajadores son aspectos que pueden ser controvertidos.
Cuando a la discusión se suman los niveles salariales, el tema se complejiza más: los municipales de Córdoba duplican en sueldos a los empleados de la Provincia y faltan mucho más.
Y si la comparación se realiza entre públicos y privados la brecha se agiganta: a nivel nacional, en el sector público el salario medio es de 25 mil pesos y en el sector privado, de 21.500. El ausentismo es menor entre privados, y la disparidad, mucho mayor.