Espanto por otra niña asesinada
Tenía 11 años y estaba desaparecida de su hogar.
Un vecino quedó detenido. Incidentes.
El asesinato de una niña de 11 años, identificada como Camila Borda, generó ayer una ola de dolor y repudio en la ciudad bonaerense de Junín, donde centenares de personas marcharon para pedir justicia y protestar por el homicidio, por el que un vecino de la víctima fue detenido.
El fiscal Sergio Terrón dijo que el caso “está esclarecido” con la detención del imputado por el delito de homicidio agravado, en cuya casa se encontró, además del cuerpo sin vida, la bicicleta de la niña.
Cerrón informó que, debido a la tensión reinante, agentes de seguridad custodiaban la plaza central y edificios públicos de la ciudad del noroeste de la provincia de Buenos Aires.
La joven había desaparecido durante el mediodía de ayer y su cuerpo fue encontrado horas después, cuando otros menores del barrio Rojas, de Junín, ingresaron a la casa del acusado al divisar la bicicleta de la víctima, que era intensamente buscada.
El cuerpo de la niña asesinada fue encontrado atado y amordazado. El fiscal ordenó una serie de peritajes para determinar cómo fue que murió efectivamente la chica y si existió abuso sexual.
Vecinos intentaron atacar al acusado cuando la Policía lo detuvo, por lo que los agentes de seguridad debieron usar cartuchos de estruendos para dispersarlos, según reportes de medios locales.
Bolsa en la cabeza
Cuando los efectivos de la Policía irrumpieron en el domicilio del sospechoso, el propietario se mostró muy nervioso.
Tras revisar todo el inmueble, los uniformados hallaron el cuerpo de la niña en el baño de la planta alta, según fuentes oficiales. “Estaba vestida, adentro de la bañera: tenía una bolsa en la cabeza y un cable, o una soga, en el cuello”, detalló un vocero.
El sospechoso, identificado como José Carlos Varela, un changarín de 40 años que hace cuatro meses cuidaba el lugar, fue detenido. “El sujeto no negó el crimen”, indicaron fuentes policiales citadas anoche por el diario Clarín.