El sueño de recibir a un millón de chinos
“La apuesta de Argentina al turismo es porque sabemos, a ciencia cierta, que este sector no va a dejar de crecer en la próxima década. Y va a crecer a niveles realmente importantes”. Quien habla es Gustavo Santos, ministro de Turismo de la Nación, quien menciona un estudio de la Organización Mundial de Turismo (OMT): en los próximos años, el mundo pasará de 1.200 millones de viajes a 1.800 millones. “Es una industria que va a crecer 50 por ciento en el planeta”, dice.
Por eso, Argentina trabaja en el exterior en busca de turistas que vengan al país. Es una tarea que lleva tiempo, pero que, según cree el Gobierno, aportará gran parte de las inversiones esperadas.
“Sabemos que eso va a pasar. Sabemos cómo va a crecer el PIB (producto interno bruto) de los emisores de turismo. Y sabemos quiénes se van a beneficiar: los países que creen las condiciones para participar de ese derrame de la mejor manera posible”, explicó.
Santos dialogó con La Voz en Italia (adonde fue invitada por el Ministerio de Turismo para participar de la 22ª edición de la Borsa Mediterranea de Turismo –BMA–, en Nápoles), el fin de semana del 23 al 25 de marzo. Allí, Argentina fue huésped de honor.
En Italia se pudo ver parte de la estrategia que despliega el Gobierno en busca del turista extranjero, sobre todo europeo y asiático. Promoción de tarifas, promesa de conectividad local y oferta hotelera no sólo en Buenos Aires, sino en todas las provincias, junto con diferentes planes de esparcimiento que combinan desde lo religioso, pasando por la aventura hasta el turismo LGBT (lesbianas, gays, bisexuales y transexuales) .
“Los países que hoy tienen la mayor cantidad de turistas no son los que más van a crecer. Ellos ya tienen un límite. España, por ejemplo, que es líder en turismo, tiene una capacidad de crecimiento mínima. Es más: es un país que ya está teniendo, en algunas regiones, rechazo al turismo por el exceso de carga de determinados destinos. Ahí hay una enorme oportunidad para América del Sur y para Argentina”, describió Santos.
Chinos
La mayor contra de Argentina es la distancia geográfica respecto del resto del planeta, en especial de los principales centros emisivos, como los llama Santos.
“Sobre todo de los asiáticos, que van a ser líderes en ese crecimiento. Pero nos estamos preparando. Por ejemplo, con el acuerdo con la plataforma de ventas Alibaba, para que ellos sean los que vendan el turismo argentino en China”, dijo el ministro.
“Ese acuerdo nos obligó a salir a negociar con todas las empresas que vuelan a China, y a su vez vuelan hacia Argentina. Es el caso de Aeroméxico, que vuela a Shangái. Estamos tratando para que vendan al Distrito Federal junto con Argentina. Para construir la estructura de conectividad que nos permita captar ese mercado”, enfatizó.
Según números oficiales, el año pasado visitaron Argentina unos 60 mil turistas chinos y el objetivo es que, en 2020, sean unos 150 mil. “Sabemos que eso va a crecer. Y aspiramos, con el tiempo, al millón de chinos. Dependerá de la conectividad que podamos captar”, agregó.
En Italia, Santos utilizó su paso por la BMT, de la que participaron más de 400 expositores, para vender a la Argentina. “Tenemos que desarrollar la infraestructura de conectividad. Sin eso, no hay ninguna posibilidad de nada. Ni para el turismo internacional ni para el interno”, cerró Santos.