Todos los escenarios hoy son posibles
Pese a que se trata del principal contrato de la Municipalidad de Córdoba, la ciudad no logra adjudicar una licitación de la basura desde los años ’90. La última fue la de Cliba, luego fueron todas experiencias que supusieron contrataciones directas: desde la conformación de la municipal Crese hasta la contratación de Lusa y de Cotreco en 2012. El gasto nunca dejó de crecer en estos años, y la cantidad de basurales a cielo abierto fue batiendo sucesivos récords.
La gestión de Ramón Mestre ya fracasó en su primer intento de licitación. Con tres oferentes admitidas y tres propuestas económicas que no se alejan demasiado del presupuesto oficial, esta vez una adjudicación del servicio parece posible. No es un proceso descollante: apenas tres oferentes para tres zonas de servicio, dos de los cuales son las actuales prestatarias.
Loscambiosqueelnuevo servicio promete a los cordobeses tampoco representan un salto de calidad: se anuncia lo mismo de hoy, más un día de recolección diferenciada en toda la ciudad y un servicio que no deje a los carreros como únicos responsables del traslado de escombros y de poda. Los contenedores seguirán limitados al Centro.
Los precios difundidos ayer parecen poner en una situación competitiva a la tercera en discordia: el grupo Vega-Caputo, resistido tanto por las actuales prestatarias como por el poderoso gremio de los recolectores (Surrbac).
No obstante, ayer los primeros trascendidos desde las actuales prestatarias locales eran idénticos a los que surgían desde el Palacio 6 de Julio: las propuestas económicas se analizan combinadas entre las zonas y, además, en combo con las calificaciones técnicas. Resultado: Vega Caputo quedaría afuera, pese a sus buenos precios. La firma avisó que irá a la Justicia si eso ocurre.
Igual, no está todo dicho: el municipio solicitará una mejora de oferta a las tres oferentes, que es como barajar y dar de nuevo después de mostrar las cartas.
Hoy todos los escenarios son posibles. No obstante, Lusa y Cotreco aparecen en casi todos esos escenarios: como adjudicatarias o continuando con el actual régimen precario hasta la llegada del próximo intendente.