Pagani: El déficit de infraestructura impide ser competitivos en el mundo
La corrección del tipo de cambio registrada a fin de 2017 “ayudó” a mejorar la competitividad de la industria argentina, pero “no alcanza”. Y uno de los principales ejes para reinsertarse en el comercio mundial es mejorar la infraestructura del país: conectividad vial, ferroviaria y marítima.
Eso señaló ayer el CEO de Arcor, Luis Pagani, en conferencia de prensa, al cerrar las actividades en Córdoba del Business 20 (B-20), el foro de empresarios previo a la cumbre de los países del Grupo de los 20 (G-20).
Pagani señaló que Córdoba fue “especialmente castigada” con falta de inversiones “durante el gobierno anterior” (en alusión al kirchnerismo) y destacó que la actual administración “es consciente” del problema logístico que tiene el país y que trabaja en ello.
Destacó como “clave” el diálogo entre empresarios y sector público, tanto en la escala global del B-20 como en el país con los distintos niveles de gobierno.
El empresario preside uno de los grupos de trabajo del B-20, focalizado en consensuar propuestas en relación con la producción sustentable de alimentos.
Por su parte, Miguel Kozuszok, presidente de Unilever Latinoamérica y también miembro del grupo, remarcó que Argentina tiene una gran oportunidad en alimentos, debido a que produce 10 veces más de lo que consume su población.
En esa línea, resaltó que la industria vive una revolución disruptiva, marcada por la digitalización y las nuevas demandas del consumidor hiperinformado: productos más saludables y trazabilidad, entre otras demandas.