Un puente para saltar la grieta, sin un líder claro
El Peronismo Federal lo conforma un grupo de legisladores nacionales peronistas que vienen de distintas vertientes. Por ahora, consensuó un discurso para tratar de posicionarse en el escenario nacional hegemonizado por Cambiemos y por el kirchnerismo: “Construimos una herramienta para superar la grieta. Al macrismo y al kirchnerismo les es funcional la grieta”, dijo Miguel Pichetto, referente y armador de este nuevo agrupamiento, que nació en el Senado, pero que ahora tiene fuerte presencia en Diputados, con la incorporación del massismo.
Sus dirigentes se definen como “federales” porque la mayoría son del interior. Hablan de disputarle el poder a Cambiemos, pero cuando este espacio surgió en la Cámara Alta, su objetivo era modesto: plantársele a Cristina Fernández, quien llegó al Senado por la provincia de Buenos Aires.
Pichetto admitió en su mensaje que ningún movimiento político crece sin un líder.
En este país, un líder es alguien que aspira a ser presidente de la Nación. No es el caso de Pichetto, al menos por el momento.
El senador rionegrino es un dirigente experimentado, que militó en todas las etapas del PJ en el poder: en el menemismo y también con los Kirchner.
Respetado por sus pares por su capacidad de análisis político, el mismo Pichetto aseguró que este grupo debe buscar un líder.
Por el momento, los dos dirigentes con proyección nacional que abrevan en este sector son el gobernador de Salta, Juan Manuel Urtubey, y el exdiputado Sergio Massa.
Muchos esperan que José Manuel de la Sota también se sume. El exgobernador de Córdoba está en el exterior y ayer hubo pocos dirigentes de su confianza. Su pareja, Adriana Nazario, se disculpó con los organizadores por su inasistencia, pero les aseguró que está dentro de este esquema.
Con fuerte presencia en el Congreso, este espacio debe demostrar que puede disputar el poder y ser un puente parar saltar la grieta entre el macrismo y los K.