Proponen que las mujeres puedan bajar del ómnibus en lugares seguros
Lo proponen como un derecho más para protegerse de agresiones y acoso callejero. Regiría durante los viajes nocturnos, desde las 22 y hasta las 5 de la mañana.
Mirar para todos lados y recorrer en soledad calles desérticas. Este es el reto al que se enfrentan las mujeres en nuestra ciudad cuando, en horario nocturno, hacen uso del transporte urbano y les toca descender en los puntos estipulados para cada tramo.
Con la idea de reducir la distancia hasta llegar a destino, el próximo jueves tomará estado parlamentario un proyecto que busca establecer un “régimen de paradas a demanda”, entre las 22 y las 5 de la madrugada. De esta manera, pasajeras y personas con discapacidad o movilidad reducida podrán solicitar a la conductora o al conductor bajar en paradas no oficiales, respetando la ruta original de la línea.
Actualmente, el artículo 50 de la ordenanza que establece el marco regulatorio para el servicio de pasajeros, indica que entre las 0 y las 6 el chofer puede detenerse fuera de las paradas habituales. Pero la concejala Miriam Acosta, presidenta de la Comisión de Equidad de Género, en el Concejo Deliberante de la ciudad, asegura que hay “mucho desconocimiento” y que la responsabilidad está en manos del conductor. Por eso, propone un proyecto que acentúe el derecho del usuario, precise el concepto de “paradas a demanda” y además se ajuste a los horarios de salida laboral de muchas mujeres trabajadoras.
En tanto, Ana Julia Capuccino, vocera de Ersa, coincide en que los usuarios no están al tanto de este artículo y agrega: “Lo que te puedo confirmar es que no recibimos reclamos de gente que le haya pedido al conductor bajar en algún punto y él se haya negado”. Al mismo tiempo, aclara que, en materia de seguridad, la empresa invierte alrededor de “800 mil pesos mensuales en policías adicionales sobre las líneas”. Acompañan el recorrido nocturno completo, en la mayoría de las unidades.
Desde un tuit
La propuesta de hacer foco en las mujeres se sumó a la agenda con la concejal Miriam Acosta, reavivada por un tuit que compartió una periodista de La Voz ,enel que cuenta cómo se lleva adelante este sistema en Montreal (Canadá). Allí los colectivos exhiben carteles en todas sus unidades que anuncian un servicio especial para mujeres que viajan solas de noche. Canadá destaca como principal regla dos horarios diferentes: a partir de las 19.30, de agosto hasta abril y desde las 21 en los meses restantes. Las pasajeras indican al conductor, por adelantado, un lugar donde desean bajar y el vehículo se detiene lo más cerca posible de ese punto.
Contra el acoso callejero
En el proyecto, que será debatido en Córdoba en las próximas semanas, se presenta un dato clave, relevado por el Instituto de Género y Promoción de la Igualdad (dependiente de la Defensoría del Pueblo de la Provincia): en nuestra ciudad, 6 de cada 10 mujeres cambian su recorrido para evitar el acoso callejero.
“Esto hace clara referencia a las limitaciones de movilidad que sufren las mujeres que eligen o son obligadas a reducir su desplazamiento por el espacio público a causa de la inseguridad y otras razones relacionadas a la violencia machista”, expresa el documento.
Comentarios no deseados, gestos y acciones con connotación sexual son algunas de las situaciones a las que muchas están expuestas cuando caminan solas las calles de Córdoba. “Construir una ciudad con perspectiva de género es adecuar aquellas normas o conductas que hacen que la mujer transite con mayor seguridad por la ciudad”, subraya Acosta.