Más inflación y menos crecimiento
Para los empresarios cordobeses, la suba del dólar que se registró la semana pasada, y que generó sacudidas en el mercado financiero y cambiario, es un fenómeno coyuntural, más ligado a la política que a nuevos problemas económicos.
Así lo manifestaron los ejecutivos que participaron ayer de una nueva reunión de la Fundación Mediterránea, en la cual disertaron el economista jefe del Ieral Cuyo, Gustavo Reyes, y el periodista Alfredo Leuco.
En un encuentro que analizó la situación del dólar, la inflación y las tarifas, los empresarios descartaron mayores complicaciones.
“Es una situación coyuntural, el país va a salir adelante. El Gobierno tomó la economía en una situación muy complicada, y ahora está mejor de lo que estaba. Esto es una coyuntura que la Nación tendrá que pasar y la sociedad deberá dar su apoyo, porque de esto se sale entre todos”, resaltó María Pía Astori, titular de Astori Estructuras y presidenta de la Fundación Mediterránea.
Al respecto, Alejandro Asrin, presidente de Tarjeta Naranja, agregó que hay “problemas de gestión”, pero descartó nuevos problemas con el dólar.
“Son inconvenientes, como cualquier piedra en el camino que se presenta en un plan de gestión y que hay que sortear; para eso, se requieren las mejores ideas y las implementaciones más certeras. No hay que preocuparse, hay que ocuparse”, indicó el ejecutivo.
Por su lado, César Martínez, vicepresidente de la Cámara Empresarial de Desarrollistas Urbanos de Córdoba (Ceduc), resaltó los “condimentos políticos” de la suba del tipo de cambio.
“Al sector desarrollista le afectan estos sube y baja bruscos, pero en el mediano o en el largo plazo el dólar sigue estando barato. Los costos de la construcción subieron más que el dólar. Lo que preocupan son estos cimbronazos, pero este fenómeno ya pasó”, dijo.
En el mismo sentido se pronunció
El salto que registró el dólar la semana pasada se dio en un contexto que obligó al Ieral, de la Fundación Mediterránea, a elevar sus proyecciones de inflación para 2018 del 21 al 23 por ciento, y a bajar sus pronósticos de crecimiento de la economía de 2,5 por ciento a dos por ciento.
El dato fue mencionado por Gustavo Reyes, economista jefe de Ieral Cuyo, entidad que proyectó una inflación para este año de 21 Juan Cruz Lozada, presidente de Lozada Viajes, quien confió en que “las aguas se van a calmar”.
Pero también descartó que afecte al negocio turístico: “Desde hace tiempo, el turismo tiene un dólar en muy buenas condiciones, por eso el sector crece. El dólar estaba a un precio bajo, lo que, sumado a la financiación, ayudó mucho a la compra”, analizó.
A su turno, Emilio Etchegorry, presidente de la Cámara de la Industria Eléctrica de Córdoba (Cadiec), recalcó la mala situación por ciento, en un escenario optimista, y de 25 por ciento, en uno pesimista. Según explicó, las últimas subas del dólar orientan los pronósticos hacia la alternativa más alta.
Para el economista, el aumento en los precios y el clima de incertidumbre “frenarán los motores del consumo”, por lo que hay que esperar un menor crecimiento de la economía para este año.
“La proyección original era de de las Pyme.
“No se dan las discusiones de fondo para definir qué sirve y qué no sirve de las definiciones que Argentina sostuvo en los últimos 70 años. Uno se desilusiona con la clase política por lo que está pasando. La cuestión es que no se solucionan los problemas de fondo. Hay que definir una verdadera reforma laboral y tributaria, que permitan encontrar un equilibrio sin destruir industrias. Hoy, para la Pyme es un momento complicado en extremo”, aseguró.
SON PIEDRAS EN EL CAMINO DE CUALQUIER GESTIÓN. NO HAY QUE PREOCUPARSE, HAY QUE OCUPARSE.
Alejandro Asrin, presidente de Tarjeta Naranja
AL DESARROLLISMO LE AFECTAN ESTOS SUBE Y BAJA BRUSCOS, PERO EN EL LARGO PLAZO EL DÓLAR ESTÁ BARATO. César Martínez, vicepresidente de Ceduc
2,5 por ciento, pero este escenario está más cerca de una expansión de dos por ciento”, dijo.
De todas maneras, la gran incógnita es determinar cómo impacta el ajuste anunciado por el Gobierno nacional para bajar el déficit, aclaró Reyes. “Le pega más a la construcción, pero la suba del dólar puede beneficiar al sector exportador, en un año en el que la mayoría de las economías del mundo van a crecer”, especificó.