Imputados por una muerte en un ascensor
La tragedia ocurrió en un complejo de barrio Alberdi. Homicidio culposo, la acusación judicial.
La Justicia decidió imputar por homicidio culposo a los técnicos que estaban reparando un ascensor en un edificio de barrio Alberdi, donde una mujer murió aplastada el mes pasado. La Fiscalía consideró que se trató de un acto de “negligencia”.
Dos técnicos de ascensores fueron imputados por homicidio culposo en el marco de la investigación que se sigue por la trágica muerte de una anciana. El drama sucedió en abril pasado en un edificio ubicado en el barrio Alberdi, en la ciudad de Córdoba.
Cecilia Catalina Bosco, de 94 años, acababa de poner un pie en un ascensor en la planta baja cuando, de manera inesperada, el elevador comenzó a ascender de forma repentina y no hubo forma de pararlo. La mujer falleció de manera instantánea.
La investigación judicial inicial, a cargo del fiscal de instrucción Guillermo González, ha determinado que todo sucedió en momentos en que dos técnicos (de la empresa Incast) se encontraban tratando de arreglar el elevador en la parte superior del edificio. No veían lo que sucedía abajo.
En función de testimonios reco- lectados, análisis preliminares y pericias de la Policía Judicial, los operarios no habrían seguido al pie de la letra el protocolo de actuación para esta clase de arreglos.
Desde la fiscalía se indicó que los trabajadores no habrían tomado todas las medidas de seguridad necesarias para evitar el drama.
“Fue un hecho fortuito: los operarios activaron el ascensor, mientras lo arreglaban, justo en el momento que subía la anciana. Fue una negligencia”, apuntó una fuente de la fiscalía de González.
Todo sucedió el pasado jueves 12 de abril, en horas de la mañana, cuando Cecilia Bosco llegó a la torre II del complejo ubicado en avenida Colón al 1151. Había ido a visitar a una familiar que reside en ese edificio.
La mujer, según la reconstrucción judicial, abrió la puerta de madera del ascensor y corrió la puerta metálica de tipo tijera. Cuando estaba entrando al elevador, el artefacto se accionó y comenzó a subir. “Eran los operarios que lo habían hecho mover”, comentó un vocero del caso.
Al tratarse de un caso donde medió, a priori, una negligencia o imprudencia, fue caratulado como homicidio culposo. Las identidades de los técnicos, quienes siguen en libertad, no trascendieron.
¿Y el consorcio? Por ahora, la investigación judicial, según trascendió, no ha encontrado elementos para avanzar penalmente sobre la administración.