Contundente rechazo del campo desactiva cambios en retenciones
Dujovne estudiaba postergar la baja de los aranceles. Pero una fuerte protesta del sector frenó la iniciativa.
La posibilidad de que el Gobierno nacional pusiera un freno a la baja gradual de las retenciones a la soja desató ayer un terremoto entre los productores agropecuarios de Córdoba y de todo el país.
La medida, que implicaba postergar la baja del gravamen, se analizaba en la mesa chica de Cambiemos, en el marco de las iniciativas en estudio para reducir el déficit fiscal. También, la posibilidad de restablecer un impuesto al maíz y al trigo.
Ayer, el ministro de Hacienda, Nicolás Dujovne, había señalado que “todas las opciones” estaban sobre la mesa, cuando fue consultado sobre el tema.
“Sería una traición al productor”, lanzó Gabriel De Raedemaeker, presidente de Cartez. “Sería enfrentarse con el sector que más apoyó al Gobierno”, sostuvo. Recordó que este año la cosecha de soja ha sido magra y que podría demorarse la de trigo.
En tanto, la Comisión de Enlace de Entidades Agropecuarias de Córdoba emitió un duro comunicado. “De concretarse, habrá llegado el momento en que modificaremos apoyo por oposición”, advirtió.
Por la tarde, tras una reunión con el titular de Agroindustria, Luis Miguel Etchevehere, Dujovne desactivó la medida.
La posibilidad de un cambio sobre el esquema de retenciones al campo desató ayer un terremoto en los productores agropecuarios de todo el país y obligó al Gobierno nacional a desactivar la iniciativa.
Primero, fueron rumores que trascendieron en Buenos Aires. La necesidad de bajar el déficit fiscal llevó al ministro de Hacienda, Nicolás Dujovne, a deslizar que podrían analizar un cambio. Desde la mañana, hubo versiones sobre el freno en la baja a las retenciones para la soja, o el restablecimiento del impuesto sobre el trigo yelmaíz.
Una reunión entre Dujovne y el ministro de Agroindustria, Luis Miguel Etchevehere, por la tarde desactivó la idea. Una idea que había ya hecho mella en Córdoba.
“Sería una traición al productor”, dijo ayer Gabriel De Raedemaeker, presidente de la Confederación de Asociaciones Rurales de la Tercera Zona (Cartez). “Sería enfrentarse con el sector que más apoyó al Gobierno”.
Según el dirigente, lo que pasó ayer fue “un globo de ensayo, para ver cómo respondía el sector”. El dirigente adjudica el intento a la idea de algún “tecnócrata del Gobierno que no conoce la situación real del campo”.
“Es un error gravísimo volver a ese esquema. Este año, la cosecha de soja ha sido magra y además podría haber un atraso en la siembra de trigo”, agregó.
Consultado sobre los recuerdos de la resolución 125, cuando una suba en las retenciones enfrentó al Gobierno con el campo, De Raedemaeker marcó diferencias. “Aquello fue de locos, con un gobierno nacional que no escuchaba. Esto es diferente”, respondió.
Oposición
Ayer, la Comisión de Enlace de Entidades Agropecuarias Regional Córdoba (Cartez, Sociedad Rural, Coninagro y la Federación Agraria) emitieron un duro comunicado sobre las retenciones. “De concretarse los insistentes anuncios periodísticos de los últimos días, para evitar ser cómplices de una decisión errónea habrá llegado el momento en que modificaremos apoyo por oposición”, dijeron.
“Sí, son posiciones duras”, reconoció De Raedemaeker sobre el comunicado. “Pero el año pasado, y sabiendo que estaba planteada la quita de cinco puntos en las retenciones, vimos cómo estaba el país y acompañamos el retraso. Y este año se replanteó la quita del 0,5% desde enero. Y lo acompañamos. Por eso, subir las retenciones sería ir marcha atrás con todo”, afirmó.
El dirigente aseguró que lo que pasó ayer caldeó los ánimos. “Como para el planteamiento de un conflicto, que nadie quiere. Es que los productores no la estamos pasando bien”, expresó. “Por eso, no quisiera estar en la piel del ministro (Luis Miguel) Etchevehere, de tener que salir a justificar una situación de este tipo”, cerró.
Por su parte, Alejandro Ferrero, director de la Sociedad Rural de Córdoba, reconoció que están “preocupados” y que tienen la firme convicción de rechazar la medida.
“Estoy convencido de que hay gente mal asesorada que cree que, para hacer caja, hay que poner impuestos distorsivos”, analizó. Y dijo que el gusto amargo del campo es “demasiado importante”.
“Teníamos ejemplos positivos. Cuando asumió Cambiemos, sacó las retenciones del trigo y el maíz. Eso mejoró la rentabilidad, la vida del interior, hasta mejoraron nuestros suelos. ¿Y cómo respondió el productor? Aumentando su producción, lo que generó más divisas y benefició a todos”, ejemplificó.
¿Temen un conflicto como 2008? “Con esta gente (por Cambiemos) podemos hablar y al final entiende. El kirchnerismo fue tremendo. No podemos comparar”, advirtió. “Hoy podemos llegar a una situación que nos convenga a los dos”.
Agustín Pizzichini, vicepresidente de la Federación Agraria Argentina (FAA), compartió la preocupación. “Lo que sabemos, por trascendidos, es que quieren detener la baja de las retenciones a la soja y que quieren poner el 10% al maíz y el trigo”, afirmó ayer.
El dirigente de la FAA explicó que los productores ya han descontado de sus ventas el costo de las retenciones, tal como están hoy. “Ahora, lo que necesitamos es segmentación para las próximas siembras. Si no, estamos como en 2008, cuando los únicos que ganaban eran los grandes, y los chicos se quedaban sin nada”.
Pizzichini dice que son conscientes de cómo está el país. “Pero acá los que producimos somos siempre los más perjudicados”, se quejó, y agregó: “El campo votó a Macri, pero siente que no le respondió. Lo dicen con vergüenza”.
Sobre aquel conflicto con el kirchnerismo, Pizzichini dice que “hay situaciones parecidas”. “Pero aquella vez era demasiado lo que ganaba el campo, por eso se quisieron aumentar las retenciones. Hoy no es tan así, y además el país necesita divisas”, cerró.