Sin respuestas en la costa de Libia
BRUSELAS. Tras la cumbre informal sobre inmigración, en la que ayer participaron 16 países de la Unión Europea (UE) en Bruselas, los jefes de Estado coincidieron en que hubo “progresos” y “primeros consensos” en el urgente tema, de cara a un acuerdo en el Consejo Europeo este jueves.
Con más de mil migrantes esperando en las aguas del Mediterráneo para que algún país de la Unión Europea (UE) los acoja, los líderes de 16 países del bloque buscan respuestas conjuntas para dar alguna solución a la situación de emigrantes y de refugiados.
Si bien las posturas previas al encuentro pendulaban entre crear centros de desembarco y un duro control de las fronteras, pasando por acuerdos bilaterales, a la salida el discurso predominante fue resaltar los puntos en común.
La canciller alemana, Angela Merkel, afirmó que coincidencia en que “no se puede dejar solos” a los socios más afectados por la llegada de la inmigración irregular y que los refugiados “no pueden elegir” en qué país piden asilo.
Por su parte, el presidente del Gobierno español, Pedro Sánchez, aliado de la alemana y confiado en que haya acuerdo, calificó a la cumbre como “un paso adelante”.
El mandatario francés, Emanuelle Macron, celebró el “enfoque de conjunto” para soluciones externas, “como la protección de las fronteras”, e internas “para los movimientos secundarios”.
Partidario de una línea más estricta, el primer ministro de Malta, Joseph Muscat, dijo que el encuentro había sido “una señal de que hay voluntad de ir hacia más cambios operacionales” en la política migratoria europea.
En la misma línea se pronunció el primer ministro belga, Charles Michel, que aboga por un control más “estricto” de las fronteras exteriores, y dijo que si los países continúan trabajando en “medidas realmente operacionales”, será posible conseguir “progresos” el próximo jueves.
A la salida de la reunión, el premier italiano Giuseppe Conte tuiteó que volvían a Roma “decididamente satisfechos” y subrayó: “Hemos dado la dirección correcta al debate actual.”
Alexis Tsipras, primer ministro de Grecia, un país destino de miles de refugiados, fue más sincero y dijo que “el gran dilema” al que se enfrenta la Unión Europea es si quiere “soluciones europeas” a un “problema europeo” o “creemos que cualquier país tiene que resolver el problema por sí mismo”.
Los ausentes son los países del Grupo de Visegrado –Polonia, Hungría, República Checa y Eslovaquia–, que rechazan el sistema de cuotas de reparto, piden más control de las fronteras y crear centros de acogida fuera de la UE. ROMA, TRÍPOLI. Unos mil migrantes se encuentran en dificultades ante las costas de Libia, en su intento de cruzar el Mediterráneo central hacia Europa, según señaló ayer la organización humanitaria española Proactiva Open Arms .
El Gobierno italiano ordena a las organizaciones no gubernamentales (ONG) que no rescaten a los inmigrantes. Su política es que lo haga la guardia costera libia, la cual rescató ayer –según sus datos– a 97 migrantes en la última de una serie de operaciones de este tipo ante las costas del país.
El rescate tuvo lugar cerca de la ciudad de Zliten, a unos 150 kilómetros al este de la capital Trípoli, informó el centro de medios en un comunicado.
Entre los rescatados, hay 26 niños y 22 mujeres. Los migrantes, todos ellos africanos, fueron trasladados a una base de la marina en Trípoli.
En un incidente separado, la Media Luna Roja libia (equivalente a la Cruz Roja occidental) dijo haber recuperado los cuerpos de dos migrantes ante las costas occidentales de Trípoli, sin que se conozcan las circunstancias exactas de su muerte.
El ministro del Interior italiano, Matteo Salvini, líder de la xenófoba agrupación política Liga del Norte y una de las voces cantantes del actual Gobierno de la península, declaró: “Basta con las voraces organizaciones humanitarias”.
Salvini opina que son las autoridades libias las que deben ocuparse y devolver a los migrantes. Italia ha cerrado sus puertos a los barcos de la ONG con migrantes rescatados del mar. Las mujeres celebraron ayer el levantamiento de la prohibición de conducir en Arabia Saudita, saliendo a las calles a manejar en una jornada que muchas calificaron de “histórica”. El rey Salman emitió el decreto correspondiente el pasado diciembre, en respuesta a una serie de campañas saudíes y de grupos de derechos internacionales que lo condenaban como símbolo de opresión. La Fuerza Aérea rusa bombardeó este fin de semana, por primera vez en un año, la provincia de Daraa, en el sur de Siria, informó ayer el Observatorio Sirio para los Derechos Humanos. Aviones rusos realizaron casi 70 ataques contra localidades controladas por rebeldes. Además, la Fuerza Aérea siria lanzó casi 20 barriles bomba, repletos de explosivos y metralla, un arma prohibida.