“Acá ni siquiera tenemos internet en el colegio”
Las investigaciones internacionales sobre la cultura digital chocan con la realidad de los recursos escasos. No todas los países –y en estos, no todas las escuelas– tienen similar acceso a la tecnología.
Desde la plaza Olmos de Río Cuarto, donde todas las tardes decenas de adolescentes se reúnen a tomar mate, alumnos de escuelas públicas cuentan cómo ven la posibilidad de aprovechar sus competencias digitales en el aula.
“Con el celular aprendés más fácil que con un libro; en los juegos uno aprende viendo como juegan los otros, jugando con chicos de otras partes del mundo. Vas mejorando a medida que más practicás. Estaría buenísimo que en el colegio se pudieran hacer cosas con el celular, pero no nos dejan; aparte no tenemos ni internet, nunca anda”, explica Gustavo (17).
Carolina (14) completa: “En el colegio, internet sólo se puede usar en las computadoras, a nosotros no nos pasan la clave porque dicen que perdemos el tiempo”.
“Con los compañeros tenemos grupos para pasarnos los deberes y ayudarnos. Y lo que no sabemos lo buscamos en YouTube o en Google. El problema es que a veces no tenés crédito. Por eso nos venimos acá, a usar el wifi de la plaza, que está bueno y también tiene cargadores”, comenta Brisa (14).
Respuestas similares se replicarían en todo el país.